Caracteristicas de un buen sustrato

El substrato sustrato, es un medio que se emplea para proporcionar a la planta el medio ambiente radicular ideal para su desarrollo, garantizando tanto el anclaje mecánico como el suministro de aire, agua y elementos nutritivos.

En el mercado ornamental y hortícola, el substrato sustrato es todo material sólido distinto del suelo, natural, de síntesis o residual, mineral u orgánico, que, colocado en un contenedor, en forma pura o en mezcla, permite el anclaje del sistema radicular de la planta, desempeñando, por tanto, un papel de soporte para la planta. Así, el sustrato puede intervenir o no en el complejo proceso de la nutrición mineral de la planta.

Lograr un buen sustrato entraña una gran dificultad, ya que normalmente se emplean en contenedores con un espacio limitado. Por tanto es fundamental el uso de substratos de alta calidad que aporten la aireación, el contenido de agua y la capacidad de intercambio catiónico equivalente a un volumen mayor de suelo convencional.

Para ello, es fundamental que el sustrato posea una serie de características físicas, químicas y biológicas determinadas, que en función de su peculiaridad concreta… determinarán su elección. Entre estas características que destacan en la estructura de un buen sustrato están el espacio poroso total, la capacidad de retención de agua, la salinidad o nivel de fertilización, el pH, etc.

Pautas generales a tener en cuenta:

  • Capacidad de aireación y retención de humedad.- Normalmente, una mezcla de turbas de sphagnum suele tener unos buenos niveles. Para optimizarlos, se emplean productos en su mezcla como la perlita, la arena o la lava volcánica de cara a aumentar la capacidad de aireación de la mezcla (disminuyendo la capacidad de retención de humedad). Si por el contrario se le añade arcilla… se obtendrá el efecto contrario. Todo depende del objetivo perseguido.
  • Estructura.- Normalmente se debe de buscar una estructura media, ya que una demasiada fina, aunque apropiada por ejemplo para semilleros, daría al sustrato una baja capacidad de aireación.
  • Salinidad.- Es un factor muy importante ya que substratos muy salinos pueden perjudicar el buen desarrollo de nuestras plantas, sobre todo si además lo incrementamos sin saberlo con el abonado. Por ello es recomendable el uso de substratos con bajos contenidos en sales, con conductividades (medida empleada para cuantificar este parámetro) menores de 800-1.000 µS.
  • pH.- Un pH en torno a 6 (neutro o ligeramente ácido) es el recomendado para la mayoría de las plantas. Para las acidófilas se recomienda sobre 5,6 e incluso algo inferiores.