Consejos para almacenar semillas

Frescura, variedad y sobre todo nada de pesticidas: eso es lo que obtienes al hacer tu propia bodega casera de semillas.

Frente al avance de la agricultura quimica y las semillas geneticamente modificadas, cada vez mas personas se interesan en el cultivo de autoconsumo, lo que no solo garantiza la frescura y disponibilidad de frutas y verduras de temporada en nuestra casa, sino tambien el comenzar a pensar en nuestros alimentos como algo importante: pasar de comprar productos a cultivar alimentos.

A continuacion exponemos siete consejos a tener en cuenta para almacenar semillas:

Trata de tener una rica variedad de semillas aun de las mismas frutas, como palta, frijol (excelente fuente de proteina) o lechuga. Esto no solo te dara opciones para elegir y ayudara a complementar tu alimentacion, sino que te permitira prepararte para sembrar lo que necesites en cualquier clima que se te presente.

Algunas semillas pueden retirarse directamente de las frutas, como de limones, naranjas o manzanas. Si vas a almacenarlas durante periodos prolongados procura que las semillas esten secas (sin restos de pulpa, despues de lavarlas), y en un lugar alejado de la luz. Tal vez prefieras regalar las semillas que no planees utilizar en un año para que alguien mas las cultive.

Para secar las semillas despues de lavarlas puedes colocarlas en el interior de un recipiente de vidrio, pero procura no utilizar toallas de papel, pues las semillas mas pequeñas pueden dañarse si se pegan a el. Luego simplemente dejalas al sol durante unos dias, solo lo suficiente para que todos los restos de pulpa se desprendan, pero no tanto como para que germinen.

Etiquetar claramente tus semillas te permitira saber a que especie y variedad pertenecen, especialmente si no estas familiarizado aun con todas las semillas que quieres plantar. Tambien coloca la fecha en que guardaste las semillas en la misma etiqueta para llevar un buen control sobre cuando piensas ponerlas en tierra.

Las semillas de algunas verduras como la lechuga pueden almacenarse en bolsas de papel y no necesitan secarse, a diferencia de las de muchas frutas. Cuando una flor o un vegetal comienza a secarse, es buen momento de extraer sus semillas (lo que ademas crea una interesante metafora de la continuidad de la vida.)

Cuida que el lugar donde almacenas tus semillas no tenga demasiada humedad y este fresco. Tambien es importante que el lugar este seco y alejado de fuentes de humedad, como goteras u otras filtraciones de agua. No quieres que tu bodega se convierta en una selva.

Algunas semillas (como las de haba o soya) pueden almacenarse en el refrigerador o incluso congelarse para ser usadas mucho tiempo despues. Algunos libros pueden ayudarte a saber que variedades pueden ser utilizadas despues de congelarse, pero como siempre, lo mejor es probar y cerciorarse por si mismo.