Desarrollan plantas que producen oxido nitrico para potenciar sus defensas

Argentina. Lorenzo Lamattina, cientifico argentino de CONICET, explica en Salamanca una linea de investigacion con muchas posibilidades biotecnologicas

El oxido nitrico (NO, por sus siglas en ingles) es una pequeña molecula gaseosa que tiene numerosas implicaciones para el crecimiento y la defensa de las plantas ante situaciones de estres como el exceso de frio o de calor. Numerosos cientificos estudian en todo el mundo esta molecula presente en todos los seres vivos con diferentes funciones, entre ellos, un grupo de Mar del Plata (Argentina) que trata de desarrollar plantas que, en caso de estres, incrementen su produccion de NO de forma automatica.

Lorenzo Lamattina, investigador del Instituto de Investigaciones Biologicas, un centro del Consejo Nacional de Investigaciones Cientificas y Tecnicas (CONICET) y la Universidad Nacional de Mar de Plata, ha explicado su trabajo hoy en el Instituto Hispanoluso de Investigaciones Agrarias (CIALE) de la Universidad de Salamanca, ya que en este centro tambien hay un grupo de investigadores que estudian el oxido nitrico en plantas.

«El oxido nitrico se comporta como una hormona y es fundamental para el crecimiento y la defensa de las plantas frente a temperaturas extremas o agentes biologicos patogenos, es un elemento esencial», afirma en declaraciones a DiCYT el experto argentino. Su trabajo con esta molecula se ha prolongado durante casi dos decadas y ha logrado importantes resultados. «Hemos encontrado que regula el crecimiento de las raices», afirma. Aunque dicho crecimiento es una funcion propia de las hormonas conocidas como auxinas, en realidad estas pierden su efecto sin presencia del NO. Ademas, esta molecula tambien permite que las plantas crezcan normalmente en suelos donde el hierro no esta disponible, segun han comprobado los cientificos.

En estos momentos, «estamos trabajando en la forma de mantener regulada una produccion de oxido nitrico para momentos en que las plantas estan estresadas, por ejemplo, en suelos salinos o con altas temperaturas». El objetivo es producir NO en los momentos clave para que la planta se pueda defender por si misma y de forma que la respuesta sea instantanea.

Para ello, el equipo de Lamattina se ha fijado en unas enzimas que produce una cianobacteria denominada Synechococcus, un organismo fotosintetico. Al colocar esas enzimas en las plantas y regulandolas con un promotor que se expresa en condiciones de estres, «logramos que la planta produzca un bonus de oxido nitrico», afirma.

Para que estos experimentos lleguen a tener una aplicacion real aun tienen que pasar los rigurosos controles que se exigen a las plantas transgenicas para demostrar que el proceso es inocuo. El motivo es que se trata de plantas que contendrian un gen de otro organismo, aunque se trata de un organismo fotosintetico, como las propias plantas, y que ayudaria a producir el NO en el momento en el que la planta lo necesita.

Las posibilidades biotecnologicas de esta linea de investigacion son muy grandes porque se ha visto que el NO esta involucrado en numerosos procesos fisiologicos. «Detras de muchas hormonas esta funcionando el oxido nitrico como un regulador que permite que las hormonas puedan funcionar correctamente», explica el especialista.

Una molecula importantisima para diversos campos de la ciencia

En la actualidad esta molecula centra la atencion de muchos investigadores de ramas muy diversas. En el año 2000 apenas habia 30 publicaciones cientificas por año acerca de NO y plantas, mientras que en la actualidad se contabilizan mas de 800, «casi mas que de las de auxinas, una hormona que se conoce hace 200 años», apunta Lamattina, lo que da idea de la importancia de este campo de investigacion.

Sin embargo, el NO tambien es muy importante en la actualidad en investigacion biomedica, ya que en animales regula la presion sanguinea, entre otras funciones. De hecho, hace años se trataban los infartos agudos por medio de nitroglicerina pero no se sabia por que este remedio era efectivo, hasta que se descubrio que el responsable era el rastro de oxido nitrico que queda en la nitroglicerina. Este hallazgo le valio el premio Nobel a sus autores en 1998 y, a partir de ahi, algunos investigadores empezaron a estudiar el NO en las plantas.

El investigador argentino ha conocido de cerca el trabajo del CIALE, que en parte tambien se ocupa del papel del oxido nitrico en las plantas. «No descarto que en el futuro podamos tener algun proyecto en comun y sumar esfuerzos, ya que «el trabajo que realizan aqui en Salamanca es muy importante», asegura, en torno a investigaciones punteras y con publicaciones en revistas de primer nivel.