El injerto en plantas de tomate en rama

El cultivo del tomate en rama es todo un arte que ha ido pasando de generación en generación y que gracias a este, se ha podido mantener una gran calidad de vida. Hoy en día existen muchos métodos automatizados para cultivar todo tipo de hortalizas y frutas que garantizan resultados impresionantes.

Uno de los más antiguos y aún más utilizados son los injertos, ya que gracias a estos es posible mezclar determinadas cualidades de ciertas plantas y lograr obtener mejores resultados. 

Como buenos agricultores, debemos saber que el injerto es una de tantas técnicas que se pueden utilizar para sacarle provecho a la cosecha, esta práctica es muy simple y solo se necesita saber un poco sobre las plantas a injertar.

Esta práctica consiste en hacer una selección de los mejores patrones vegetales para crear una forma adecuada a la siembra y a diferencia de las semillas convencionales, estas pueden hacer que la planta dé frutos mucho antes de tiempo o que simplemente crezca mucho más fuerte.

La desventaja principal que podemos encontrar, es que la planta no necesariamente proporcionará semillas para seguir cultivando plantas con las mismas cualidades, algo que puede parecer extraño pero cierto.

Ahora bien, con respecto a la selección de las semillas, tienes que saber que existen dos tipos de semillas:

Las semillas con patrones generativosLas semillas con patrones vegetativos

Este tipo de semillas manejan un balance entre mayor producción de fruto o mayor resistencia a las condiciones del ambiente para producir.

Este tema es toda una incógnita para los agricultores, dado que a su necesidad de recolectar la mayor cantidad en el menor tiempo, sus esfuerzos se centran en la búsqueda del balance para no repetir el ciclo de sembrado, teniendo que utilizar tanto fertilizante.  La variedad compatible es otro factor importante al momento del injerto, sobre todo y cuando nos referimos al caso del injerto de tomate de rama, es muy obvio que se necesitan dos plantas de la misma especie para mezclar sus cualidades.

Apoyándonos un poco en la teoría, podemos decir que para realizar injertos es necesario también que las plantas sean del mismo tamaño, el tallo debe tener la misma medida y  en caso de que la velocidad de crecimiento sea diferente, puedes optar por  sembrar en momentos diferentes.

Al momento de hacer el injerto, estas plantas deben estar separadas, para después unirlas y colocarlas en una “cámara de sanación” que les permita unirse con propiedad y asegurar su etapa de crecimiento tal y como lo decida el usuario.

Respecto a los injertos del tomate en rama es igual, tenemos que tener un conocimiento regular sobre las mismas para conocer cuales especies tiene características que puedan complementar a otra especie y favorecer su desempeño y es que aunque no lo creamos, hay varias especias y cada una con sus propiedades bien definidas.

La mayoría de las especies tienen su mejor momento en febrero, cuando el invierno se termina y se puede aprovechar una tierra humedad y fresca.

Por lo general, el tipo de tomate que se va a injertar suele ser una elección a considerar, dado que hay diferentes tipos de tomate, como una clase de tomate en rama que tiene mayor resistencia a las condiciones del suelo u otro tipo de tomate en rama que resiste mejor a las plagas.

Sobra decir que se pueden experimentar con diferentes tipos de plantas de tomate junto a esta para obtener algo mucho más productivo en comparación con la planta sola, aunque considerando que el sabor final del fruto pude verse afectado de manera positiva o negativa según sea el caso del injerto.

Así que el consejo que te podemos dar es que pruebes con diferentes tipos de tomate en rama, para que tú mismo puedas ver cuál es el que mejor te viene.

¿Te gusta la jardinería? Esto no te puede faltarTanto si te estás aficionando en el mundo de la jardinería como si eres un experto, no te puede faltar nada de esto: