La planta bailarina, tan llamativa como bonita

La planta bailarina es una de esas que realmente llaman mucho la atención; no por su aspecto externo, el cual es el típico de los seres vegetales, sino por el movimiento perceptible de sus hojas.

Es muy curiosa, tanto que apetece comprar algunas semillas para poder ser testigo de lo que hace. Pero como eso no suele ser posible, te voy a explicar cuáles son sus características y, sí, también te diré lo que necesita para poder crecer por si alguna vez te surge la oportunidad de adquirirla.

Codariocalyx motorius Planta bailarina

Nuestra protagonista es una planta arbustiva nativa de Asia tropical conocida como planta del telégrafo, planta del semáforo o planta bailarina y cuyo nombre científico es Codariocalyx motorius que alcanza una altura de 1-2 metros. Posee hojas simples, lanceoladas de hasta 10 centímetros de largo, y además produce flores pequeñas de color púrpura.

 

Sin embargo, lo que más llama la atención son el movimiento que hacen sus hojas: cada tres o cinco minutos rotan hacia arriba y abajo, lo cual la convierte en una de las pocas que pueden demostrarnos que los seres vegetales nunca permanecen quietos.

Si tienes oportunidad de hacerte con semillas o con una planta, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

Ubicación: en semisombra.

Riego: 2 o 3 veces por semana en verano, y cada 4 o 5 días el resto del año. Usar agua sin cal.

Sustrato: mezclar sustrato de cultivo universal (puedes comprarlo aquí) con perlita (si no sabes dónde encontrarla, puedes hacer clic aquí) a partes iguales.

Codariocalyx motorius  Planta Bailarina

Abonado: durante los meses cálidos con un abono universal líquido (como este de aquí) siguiendo las indicaciones especificadas en el envase.

Multiplicación: por semillas en primavera. Siembra directa en semillero con sustrato de cultivo universal.

Rusticidad: no resiste heladas.