Maquinas de ordeño y calidad de leche

Con el desarrollo tecnológico y crecimiento del tamaño de los rodeos, comienzan a aparecer los equipos de mayor tamaño y producción de más calidad. En este informe se aborda un importante número de problemas de funcionamiento que atentaban contra la cantidad y calidad de leche cosechada.

Comenzando con la historia de los equipos de ordeño en la Argentina se puede decir que los mismos aparecieron con el desarrollo de la producción lechera en nuestro país, y acompañaron el crecimiento de dicha producción según las necesidades de la misma (aumento del tamaño de los rodeos, aumento de producciones individuales, mayores requerimientos de calidad de leche), no estando exentos de los vaivenes propios de la economía que afectaron el crecimiento del sector lácteo y por consecuencia su crecimiento tecnológico.

En aquellos primeros años, con rodeos de un bajo número de vacas y con bajas producciones individuales, requerían de simples equipamientos, en la mayoría de los casos de “balde suspendido” o “al tarro”, con 2 a 4 unidades de ordeño, siendo contados los casos de equipos de “línea de leche”. Con el desarrollo tecnológico y crecimiento del tamaño de los rodeos, comienzan a aparecer los equipos de mayor tamaño y de línea de leche (fundamentalmente alta) y con ellos un importante número de problemas de funcionamiento que atentaban contra la cantidad y calidad de leche cosechada.

Aún no se comprendía cabalmente que “la cosecha de leche era la culminación del proceso productivo donde se había invertido tanto tiempo, esfuerzo y dinero”.

Esfuerzos estatales (INTA), privados (servicios técnicos de algunas empresas lácteas), de fabricantes y/o importadores de equipos de ordeño o de algunos pocos técnicos de la actividad privada, hicieron que se empiece a pensar en mejorar la oferta de calidad tecnológica de los equipos de ordeño.

En la década del ’80 se produce una “explosión tecnológica” con la aplicación de la “normalización de los equipos de ordeño”, de parte de los fabricantes e importadores, la venida al país de técnicos de los países más avanzados en producción láctea para capacitar a los técnicos de empresas de ordeñadoras y de actividad privada, la capacitación de los técnicos en control de equipos de ordeño con el uso de Normas ISO en el chequeo de los equipos de ordeño. Esto hizo que tengamos una tecnología de ordeño muy parecida a la utilizada en los países más desarrollados en lechería, adaptados a nuestra realidad. Estos equipos con rediseños (mínimos en algunos casos), permiten adaptarse al paulatino y sostenido crecimiento del tamaño de los rodeos y fundamentalmente al crecimiento de las producciones individuales.

Encuesta sobre maquinas de ordeñar
•    Realizada sobre respuestas brindadas por 12 controladores de máquinas de ordeñar de Argentina (Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos) y Uruguay.
•    40% pertenecen a empresas fabricantes, 33% a la actividad privada, 18% a empresas lácteas y 9% a organismos oficiales
•    Respondidas por mail. Tasa de respuesta: 30% (70% de los consultados no respondió)

Resultados
•    Respuestas sobre 1327 máquinas chequeadas
•    Edad promedio del equipo: 6.9 años
•    25% más antiguo: 25 años
•    25% más moderno: 2.4 años


•    12% con retiradores de pezoneras

< 8 unidades ………….  37 %
8    a 16 unidades ..  46 %
<16 unidades ………..    17 %

Línea “Alta” ………..  21 %
Línea “Media” …….   78 %
Lìnea “Baja” ………     1 %

Situación Actual
En los últimos años se observa una reducción marcada en el número de tambos, no así en la cantidad de vacas ordeñadas que se ha mantenido. Esta tendencia muestra que los tambos chicos tienden a desaparecer y las vacas de estos son vendidas a tambos de mayor escala.

En este aspecto vemos 3 tipos diferentes de sistemas de producción a los cuales tiende el mercado:
a)    Tambos pequeños (familiares o de cuencas no tradicionales): 120 – 150 vacas en ordeño.

En el corto plazo necesitarán:

Mínima tecnología para obtener un correcto ordeño

Se instalarán equipos usados “reciclados” de instalaciones que pasaron a tener un mayor tamaño y dejaron de usarlos por quedar “subdimensionados”.

En el mediano y largo plazo necesitarán:

De una alta automatización (escasa mano de obra), como ser: estimulación automatizada, extractores de pezoneras, sistemas de lavado automatizados/programados, medición electrónica de leche, etc.

Uso del robot en la instalación, reemplazando la escasa mano de obra y en algunas casos falta de calidad de la misma. En el mundo se están probando con éxito estos sistemas.

b)    Tambo mediano a grande: 300 – 700 vacas en ordeño.
Tecnología de ordeño intermedia y de punta. Algunos de estos  tambos con economías de escala intermedia, les cuesta crecer con recursos genuinos, y en muchos casos han evitado la venta de vaquillonas propias obligándolos a crecer sin la estructura adecuada.
Son tambos que necesitan ser rentables.
Sin embargo les cuesta demasiado el crecimiento para el “salto”, por lo que están subdimensionados y desbordados
Se observa un aumento de la producción individual por lo cual se deberían redimensionar los equipos de ordeño o mejorar la tecnología de los mismos (cantidad de vacío, capacidad de líneas y colectores, posicionamiento de las unidades de ordeño, retirado o corte para evitar sobre ordeño).

Están subdimensionados en estructuras, por lo cual se pasan muchas horas ordeñando, esto agrava el problema actual del sector en lo que respecta a la cantidad y la calidad de personal para este tipo de trabajo.

c)    Mega tambos:  >800 – 3000 vacas en ordeño
Tambos con tecnología de punta, economía de escala grande,  con  recursos que ingresan desde fuera del sector que le permiten realizar inversiones importantes con retornos a largo plazo.
Los mismos intentan ser más eficientes en su producción por manejar economías de escala logran ordeñar más litros por vacas y por lactancia.

Tienen un rápido crecimiento por compra de vaquillonas, uso de semen sexado, etc.
Muchas veces comienzan a encerrar las vacas sin asesoramiento correcto.
Los litros por vaca son mucho mas constantes. Por Ej. producciones de 28 litros/vaca/día no son raros.

En este contexto se observa un cliente promedio más exigente que quiere mayor tecnología para el ordeño y control de sus animales. Esto se ve reflejado en la gama de componentes incluidos en los nuevos equipamientos de ordeñe. Hoy se venden máquinas que incluyen mayor cantidad de componentes importados que brindan al cliente, mayor confiabilidad, menores costos de recambio y mantenimiento. También en lo referente al control de animales hay mayores demanda de equipamientos con sistemas de retirado de pezoneras o sistemas de corte, estimulación automática, medición de individual de leche, puerta de selección para aparte , programas de gestión, sistemas de lavado automático de equipos de ordeño, etc.

En general, la tendencia del mercado es hacia un cliente promedio que deberá ordeñar mayor cantidad de vacas con instalaciones más grandes y tecnificadas. Este productor está buscando un modelo productivo más eficiente que le permita ordeñar más litros a un costo operativo inferior. A tal fin, se impulsa al cambio o a la modificación de su sistema productivo actual, valiéndose de información actualizada del mercado local e internacional.

En este ámbito, el servicio, se torna relevante .Una persona debe estar siempre dispuesta a fin de brindar asistencia en la solución de los problemas, abarcando todo el sistema productivo no solo aquellos relacionados al equipamiento de ordeño.
De la misma manera, las posibilidades para el ingreso de nuevos productores al sistema, se ven limitadas (aunque son posibles) por los altos costos que involucra la inversión inicial. Siendo esta necesaria a fin de adquirir una escala aceptable que favorezca la rentabilidad del negocio.

Resumen tendencias
a)    Tambos pequeños (120-150 vacas en ordeño).

En el corto plazo
•    Equipamientos simples.
•    Algún tipo de automatización

En el mediano y largo plazo
•    Poca mano de obra
•    Alta automatización (Ej. retiradores de pezoneras)
•    Robotización

b)    Tambo mediano a grande: 300 – 700 vacas en ordeño.
•    Necesitan modificar, cambiar y/o ampliar sus instalaciones
•    Redimensionar o cambiar los equipamientos de ordeño
•    Incorporar tecnología para reemplazar mano de obra con: automatización en el estimulo y/o retiro de pezoneras, medición de producción electrónica, sistemas de programa de lavado.
•    En el mediano y largo plazo, incorporación de control de gestión de la explotación.

c)    Mega tambos:  >800 – 3000 vacas en ordeño
•    Grandes proyectos
•    Tecnología de punta
•    Máxima automatización para reemplazo de mano de obra
•    Programas de gestión para el manejo de la explotación

En todos los casos se necesitará de “servicios técnicos eficientes, rápidos y completos”

Equipo de trabajo JICAL III
Simposio “Ordeño y conservación de leche”
Coordinador: Med. Vet. Martìn POL   – Lactodiagnóstico Sur
Integrantes:
Marcelo BALDÀN, Med. Vet. DeLaval; Marcos BONTÁ, Lactodianóstico Sur; Ezequiel CABONA, Ing. Agr. DeLaval; Miguel CASARES, Ing. Agr. GEA Farm Technologies, Dante GRANGETTO, Tec. Agr. Actividad Privada; Daniel IBARROLA, Ing. GEA Farm Technologies; Pedro SERRANO, Ing. Agr. INTA Brandsen, Pablo SIRI, Med. Vet. BOUMATIC;
Equipo de ordeño.  Miembro relator: Dante Grangetto

Informe de Tec. Agr. Dante Grangetto
03564-15561009  – e-mail: dantegrangetto@yahoo.com.ar