Podar los rosales

La época de poda de los rosales depende del período de floración. Hay rosales que florecen de manera ininterrumpida de mayo a octubre y deben podarse en invierno. Otros rosales sólo florecen una vez al año, entre finales de primavera y mediados de verano y deben podarse tras finalizar la floración.

La poda a aplicar depende del tipo de rosal:

Poda de rosales miniatura y tapizantes: Eliminaremos ramas cruzadas o dañadas, así como flores y tallos marchitos. Después recortaremos todas las ramas a un tercio de manera uniforme.

Poda de rosales de copa y de pie bajo: Realizaremos un aclareo de ramas manteniendo únicamente cinco ramas. Después recortaremos esas cinco ramas por encima de la tercera yema. Es conveniente elegir yemas orientadas hacia la parte exterior del rosal.

Poda de rosales trepadores: Eliminaremos las ramas más viejas manteniendo únicamente tres o cuatro ramas principales. Después, despuntaremos las ramas secundarias y sujetaremos las tres o cuatro ramas principales con cañas o algún otro soporte para dirigirlas hacia arriba de forma que la savia circule mejor estimulando una floración más abundante.