Podemos encontrar muchas variedades locales de fresales que serán las mejor adaptadas al clima de nuestra zona. Para cultivarlas en nuestro jardín sólo tenemos que cortar un estolón y plantarlo.
Pregunta en huertos y jardines próximos para ver si tienen alguna variedad de fresa sabrosa y pídeles un brote o estolón para plantarla en tu jardín. Disfrutarás de fresas ricas y estarás colaborando en conservar la biodiversidad de tu región.
La mayoría de los fresales forman parte de alguno de los tres tipos principales de fresas:
Fresa de cosecha temprana – June Bearing. Este tipo de fresales da todas las fresas en tan sólo 2 ó 3 semanas, a principios del verano. Produce una gran cantidad de frutos. De este tipo son las que normalmente encontramos en los supermercados.
Fresa de cosecha perpetua – Day Neutral (everbearing). Con este fresal podemos disfrutar de dos cosechas, una en verano y otra en otoño. En la primera temporada, es conveniente eliminar todas las flores que salgan antes del mes de Julio.
Fresa alpina – Alpine strawberries. Este fresal resulta una planta muy decorativa para jardines de rocalla. Produce fresas pequeñas pero abundantes y extraordinariamente sabrosas. La cosecha de fresas alpinas se extiende desde mediados del verano hasta la llegada de las primeras heladas.