Los azúcares que se encuentran contenidos en la Melaza destinada a la alimentacion de ganado son de gran importancia desde el punto de vista de aporte, por su alto nivel energético capaz de cubrir sus necesidades y a un costo económicamente muy atractivo. Debe señalare que, de acuerdo a los estudios, es muy rentable incorporar melaza a la dieta de los bovinos.
Pero en numerosas ocasiones las melazas se utilizan un poco más por su agradable olor y gusto que por su valor energético. Logrando con este buen sabor y aroma la estimulación del apetito, causándose un aumento de los niveles de ingestión de los alimentos melazados, y por otro lado permite utilizar otros elementos dentro de la alimentación de mal sabor que pueden ser rechazados por los animales.
¿A que se debe que la melaza sea buena en la alimentación de los bovinos?
Las melazas son especialmente consideradas en la preparación de la alimentación de los rumiantes, principalmente para ganado vacuno y ovino, porque estimulan el crecimiento de la flora ruminal y favorece a que los animales aprovechen de una forma más positiva los alimentos fibrosos tales como la paja, heno, etc. En numerosas investigaciones se ha logrado demostrar que aumentando las cantidades de melaza en la ración, se incrementa la digestibilidad de la fibra bruta con la que se esté combinando, y de la materia orgánica en general, hasta la de incorporación de un 16% de melaza, lo cual es posible contando con el equipo adecuado. Es por eso que en las fincas ganaderas siempre es recomendable usar la melaza.
Debido al aumento constante del precio de los suplementos proteicos ha sido inevitable la búsqueda de nuevas fuentes para la incorporación de nitrógeno a los animales, utilizando la urea, pero para poder aprovechar el nitrógeno no proteico, precisan disponer de una fuente de energía, para lo cual las melazas resultan particularmente valiosas, además de enmascarar el mal sabor de la urea.
El hecho es que las melazas son muy útiles para prevenir la formación de polvo que se produce durante la elaboración y manejo de los piensos lo que ocasiona considerables pérdidas físicas de alimento, así como para el mantenimiento de los medios higiénicos, ya que el ganado es propenso a sufrir enfermedades bronquiales causadas por el polvillo u ocasionadas por éste.
Propiedades nutricionales de la Melaza para Ganado
- Posee 2.7 Mcal de Energía Metabolizable que representa, aproximadamente el 83% de la del grano de sorgo, cereal que se usa de referencia en el área pecuaria.
- La melaza contiene grandes cantidades de azúcares solubles, y es de fácil fermentación.
- Posee un contenido de proteína cruda aproximado de 4%
- Es rica en minerales, por lo que numerosos consumos o niveles en la dieta suaviza la consistencia del estiércol y llega a producir diarrea mecánica, es decir, no infecciosa.
- Por su alto contenido de azucares y agradable olor es un atrayente de moscas y llegan a formar costras en el equipo y los implementos que se usan para su manejo y mezclado.
- Nutricionalmente podemos resaltar que la melaza es rica en energía, niacina y ácido pantoténico, y con un muy mínimo nivel o exentas de vitaminas.
Aspectos fundamentales a tomar en cuenta al usar melaza en bovinos
Al valorar la Melaza en las fincas ganaderas deben tomarse en cuenta los siguientes aspectos:
- Es una significativa fuente de hidratos de carbono, con un alto valor energético y económicamente accesible.
- Su excelente sabor y olor intervienen en el aumento del apetito, provocando una mayor ingestión y grandes incrementos de peso, proporcionando también la utilización de piensos de menor calidad.
- En la comida de los rumiantes, permite utilizar forrajes de baja calidad, así como fuentes de nitrógeno inorgánico, principalmente la urea.
- Minimiza la formación de polvo durante el transcurso de fabricación y distribución a los animales, igualmente actúa como medio aglomerante que favorece la formación de gránulos o pellets obteniendo un gránulo de mejor calidad.
Ventajas y Desventajas de la Melaza en las fincas ganaderas
La melaza se emplea desde hace mucho tiempo en la alimentación del ganado por medio de su incorporación en los piensos compuestos y más recientemente como ingrediente en fábricas que comercializan mezclas con y sin forraje. Más que por motivos nutricionales, la melaza se ha empleado para evitar que el ganado separen el forraje del concentrado en mezclas completas.
Las razones de su utilización son: mejorar la apetencia, aumentar la ingestión y disminuir la separación de comida, la exigencia de encontrar nuevas alternativas nutricionales está cambiando la orientación de su empleo, y está tomando mayor relevancia su carácter nutritivo que su función de manejo en las raciones.
Diversos estudios afirman que la melaza para ganado ha cambiado su posición como producto usado básicamente por su palatabilidad para convertirse en un nutriente esencial para el mantenimiento y la eficiencia del rumen, lo cual ayudará a los ganaderos a mejorar su rentabilidad. Para esto, formular raciones de alta energía lleva a emplear un alto nivel de almidón que es potencialmente perjudicial para el ganado, al producir mucho ácido láctico en el rumen como producto intermedio de fermentación; el ácido láctico acumulado en el rumen reduce el pH, altera el ecosistema ruminal y termina provocando acidosis ruminal.
El riesgo es potencial, no siempre puede ocurrir, pero se debe ser consciente de que la minima variación en uno de los múltiples puntos que conforman el manejo alimentario puede ser el causante de alguna enfermedad, aunque la ración de la mezcla esté perfectamente formulada. En este caso, la utilización de la melaza tiene algo a favor: la composición en azúcares más sencillos, como la sacarosa, hace que su fermentación sea más rápida y completa, y que los ácidos que se producen en el rumen sean absorbidos con mayor rapidez, con lo que no se acumulan en el rumen y el riesgo de que se produzca la acidosis ruminal es mucho más bajo.
Además, los azúcares de la melaza para ganado, estimulan el proceso de fermentación ruminal, aumentando la producción de la proteína microbiana y reduciendo los niveles de amoniaco. Por consiguiente, la posibilidad de mezclar diferentes fuentes de carbohidratos no fibrosos en las raciones se muestra como una estrategia de formulación muy ventajosa para la salud ruminal, al minimizar el riesgo potencial de provocar la acidosis.
Síntomas al usar grandes cantidades de Melaza para Ganado
El uso excesivo de melaza en la preparación de la mezcla para el ganado pueden producir toxicidad, baja temperatura corporal, respiración jadeante y debilidad; los bovinos, por lo general, presentan dificultades para permanecer en pie y tratan de apoyarse contra la alambrada con la espalda y sus patas anteriores cruzadas.
El remedio reside en suspender la alimentación con melaza durante un tiempo considerable y suministrar inmediatamente al ganado una solución con alto de Fósforo (P) y Sodio (Na). Principalmente, la causa de la toxicidad se debe la mayoría de las veces a la falta de agua potable cerca del lugar donde se suministra melaza a los animales, o a un cambio excesivamente rápido a raciones ricas en melaza.
La ganadería se ha visto en la necesidad de ir evolucionando, de un sistema extensivo de producción a formas más intensivas y tecnificadas. La alimentación del ganado bovino es determinante en el costo de la producción, el cual se ha visto seriamente afectado por el aumento del precio del maíz y soya, base de muchos concentrados, así como por el cambio climático.
Usar la melaza para ganado como componente de la mezcla para el alimento de los rumiantes es una alternativa válida ya que reduce algunos costos, al momento de la selección de suplementos alimenticios.