Polinización de plantas

Las plantas se polinizan en la naturaleza gracias a la ayuda del viento y de los insectos que transportan el polen de unas flores a otras, pudiendo dividirlas en:

Plantas de polinización externa. Suelen ser plantas con flores vistosas y coloreadas para atraer a los insectos polinizadores.Plantas que se auto-polinizan. Suelen ser plantas con flores pequeñas y discretas. Se pueden polinizar a sí mismas con la ayuda del viento debido a que poseen flores perfectas, es decir, flores que poseen anteras, órgano masculino, y estigma, órgano femenino, por lo que pueden autofecundarse. Si bien, debemos tener en cuenta que no todas las plantas con flores perfectas se auto-polinizan puesto que en algunos casos son auto-incompatibles.

Si deseamos realizar una polinización manual y controlada para obtener plantas con unas características concretas, debemos recoger semillas de las plantas seleccionadas y cultivarlas dentro de una zona aislada para impedir que se polinicen de forma natural hibridándose con otras plantas de otras características. Se pueden enjaular y rodear con una malla que permita el paso de la luz y la transpiración.

Cuando las plantas crezcan, se descartarán las plantas que no conserven las características deseadas arrancándolas. Y una vez tengamos solamente las plantas con las características buscadas, las polinizaremos a mano utilizando un pincel de acuarelas pequeño y trasladando el polen de las anteras de cada flor al estigma de otra planta del grupo, pero distinta para evitar auto-incompatibilidades.

Haremos lo mismo durante las siguientes tres o cuatro generaciones, hasta conseguir una población estable que mantenga las características deseadas, momento en el que podremos cultivar las plantas en el exterior.