Profilaxis vacunal en ganado porcino Produccion Animal

Quiles, A.*; Otal, J.* y Cubero, Mª. J. **

* Departamento de Produccion Animal. Universidad de Murcia. Campus de Espinardo. 30071-Murcia. quiles@um.es

La mejora de la sanidad porcina solo se hara efectiva si se diseña, se planifica y se lleva a la practica un programa de Bioseguridad integral, en donde la profilaxis vacunal sea un punto clave pero no el unico. En efecto, solamente con vacunas no se puede prevenir, controlar y erradicar ninguna enfermedad, ya que la vacunacion forma parte de un todo y es solo una medida complementaria para combatir las epidemias. La lucha contra las enfermedades debe hacerse de un modo integrado, a traves de varios frentes como son las medidas higienicas de limpieza y desinfeccion, lucha y control de los vectores, manejo de los animales que mejore el bienestar y evite el estres, higiene del personal, control de visitas, cuarentena de los animales, aislamiento y proteccion de los edificios, vacio sanitario, etc.

La vacunacion consiste en la produccion artificial e intencionada de una resistencia especifica o insensibilidad de los animales frente a un determinado patogeno. Frente a esta inmunidad artificial, nos encontramos con una inmunidad natural resultante de superar un contagio aparente o latente (inmunidad natural activa) o cuando los lechones reciben los anticuerpos a traves del calostro de la cerda (inmunidad natural pasiva), para lo cual la cerda ha debido de estar previamente en contacto con el patogeno correspondiente. Ahora bien, ha de tenerse en cuenta que el lechon en el momento del nacimiento se encuentra desprotegido de la estimulacion antigenica externa, debido al tipo de placenta de la cerda – placentacion de tipo epiteliocorial especializada − que no permite el paso de anticuerpos maternales al feto; por consiguiente, el lechon nace sin la correspondiente proteccion inmune pasiva. Los anticuerpos maternales que se encuentran en el suero no son capaces de atravesar la barrera placentaria, concentrandose al final de la gestacion en las glandulas mamarias, para ser aportados en el calostro. Por lo tanto, el lechon, a diferencia de otras especies, en el momento del nacimiento es inmunologicamente

inactivo, dependiendo, totalmente, de la transmision de inmunidad pasiva de la cerda, a traves de la ingestion y absorcion de las inmunoglobulinas calostrales. Sin embargo, cantidades importantes o significantes de anticuerpos calostrales pueden interferir o inhibir el desarrollo de la inmunidad activa de determinadas vacunas, siendo este uno de los aspectos a tener en cuenta cuando se planifica el programa vacunal en una explotacion porcina. Sin embargo, cantidades importantes o significantes de anticuerpos calostrales pueden interferir o inhibir el desarrollo de la inmunidad activa de determinadas vacunas, siendo este uno de los aspectos a tener en cuenta cuando se planifica el programa vacunal en una explotacion porcina.

Mediante la vacunacion se consigue estimular la inmunidad adquirida, para ello se utilizan antigenos de los agentes patogenos frente a los cuales queremos proteger a los cerdos, y que de esta forma no se presente la enfermedad en cuestion. Esta inmunidad adquirida tiene memoria, es especifica y es transferible. Con ello se pretende la inmunizacion de toda la explotacion y no de un individuo en cuestion, por tanto es un concepto colectivo y no individual.

Aunque la profilaxis vacunal conlleva una serie de gastos de material y personal, dichos gastos quedan totalmente justificados si tenemos en cuenta los descensos de produccion como consecuencia de las enfermedades, asi como los gastos en medicamentos.

ILEITIS (Lawsonia intracellularis)

Actualmente, contamos en nuestro pais con una vacuna viva atenuada que se administra por via oral en el agua de bebida. Esta cepa atenuada se ha obtenido mediante la modificacion in vitro de cepas de Lawsonia intracellularis por el cultivo en pases sucesivos, gracias a los cuales se pierden los genes responsables de la patogenicidad, pero no asi los genes que garantizan la infectividad. De esta manera se consigue que el sistema inmunitario del hospedador se encuentre expuesto a todas las propiedades antigenicas, provocando una respuesta inmunitaria celular completa y adecuada, mediada por los linfocitos T.

La vacunacion de cerdos en crecimiento y de cerdas nuliparas, durante el periodo de adaptacion sanitaria, es capaz de reducir o eliminar los sintomas clinicos de la enfermedad. En algunas granjas la vacunacion ha conseguido reducir notablemente la administracion de tratamientos preventivos.

El momento de realizar esta vacunacion dependera del sistema de manejo de la granja, ya que ello influye en el momento de la aparicion de los brotes infecciosos. Asi por ejemplo, en granjas con presentacion precoz de los brotes entre las 6 y las 12 semanas, se puede vacunar a los lechones tras el destete (21-28 dias); mientras que en granjas con sistemas en multiples sitios, donde la aparicion de los brotes es mas tardia (12-24 semanas) se vacunan a las cerdos unas 6 semanas antes de la seroconversion. Cuando se vacunen a los cerdos hemos de comprobar que estos no estan recibiendo ningun tipo de tratamiento antibiotico, de manera que nos aseguremos que los antibioticos no van a interferir en las cepas vivas atenuadas de la vacuna.

NEUMONIA ENZOOTICA (Mycoplasma hyopneumoniae)

La vacuna frente a Mycoplasma hyopneumoniae reduce e, incluso, elimina las lesiones pulmonares, mejorando el indice de conversion y la ganancia media diaria en los lechones vacunados. En efecto, aunque la vacuna no evite totalmente la infeccion, minimiza los efectos inflamatorios que aparecen como consecuencia de la infeccion.

Generalmente se suelen emplear dos dosis, la primera se aplica en la primera semana de vida del lechon y posteriormente una segunda dosis hacia la semana 3ª de vida. En explotaciones con un elevado estatus sanitario y cuando las cerdas reproductoras y los lechones en transicion son negativos para el virus del Sindrome Respiratorio y Reproductivo Porcino (PRRS), se puede emplear una dosis unica a partir de la 3ª semana. Independientemente del programa elegido (monodosis o dos dosis) la proteccion de los lechones debe ser solida y durar toda la vida productiva del cerdo, alrededor de los 6 meses, ya que no se puede predecir en que momento se puede infectar el animal. Se ha comprobado que los cerdos vacunados que han sido expuestos a M. hyopneumoniae desarrollan una fuerte inmunidad que da lugar a titulos significativamente mas altos que los conseguidos solo con la vacunacion.

La eficacia de la vacunacion puede verse alterada ante la presencia de virus del PRRS o del circovirus porcino tipo 2 (PCV2) y por la presencia de una elevada tasa de anticuerpos maternales derivados del calostro. La presencia del virus del PRRS resta eficacia a la vacuna de micoplasma, por lo que esta deberia efectuarse antes de que los lechones se infecten con el virus del PRRS. Por otra parte, mas que la edad del lechon en la primera dosis, habria que tener en cuenta el nivel de anticuerpos maternales presenciales, lo que depende de la edad y del nivel de infeccion de las madres. El programa va a depender del nivel de titulos sericos que las cerdas sean capaces de transmitir a sus lechones, de manera que la presencia de un nivel alto de anticuerpos maternales en el momento de la vacunacion obligaria a retrasar la primera dosis. Un buen plan vacunal frente a M. hyopneumoniae deberia conseguir unos adecuados niveles de proteccion antes de los 60 dias de vida del lechon. Por tanto, la aplicacion de las dosis vacunales debe ser temprana pero evitando que coincidan con altas concentraciones de anticuerpos maternales. No es necesario que la tasa de anticuerpos maternales sea nula pero si, al menos, que no sea

excesivamente elevada.

Se elegira uno u otro protocolo dependiendo de una serie de factores. En lineas generales usaremos el protocolo de una sola dosis:

Cuando la incidencia de la enfermedad sea baja.

En sistemas de manejo todo dentro/todo fuera con vacio sanitario de las instalaciones.

En ausencia de otros patogenos, particularmente el virus del PRRS o de la Influenza.

Cuando exista una separacion estricta por edad de los animales.

En presencia de pocos anticuerpos maternales.

Para el resto de las situaciones emplearemos el protocolo de dos dosis. En estos casos obtendremos mejor ajuste de tiempo en relacion a la variabilidad de los niveles de anticuerpos maternales, proporcionaremos al lechon una segunda oportunidad para desarrollar respuesta inmune y se conseguira una mayor inmunidad cuando se trabaje con flujos continuos con mezcla de animales da varias edades.

Se emplea una vacuna con patogeno inactivado. No obstante, se estan desarrollando vacunas vivas atenuadas con resultados bastante aceptables. En cualquier caso, la vacuna elegida debe demostrar que puede aplicarse cuanto antes, que produce inmunidad eficaz aunque exista una determinada tasa de anticuerpos maternales y que esta inmunidad se instaura rapidamente.

Se aplica via intramuscular detras de la oreja.

A la hora de planificar un programa de vacunacion se ha de hacer un analisis del coste-beneficio, teniendo en cuenta los siguientes aspectos:

La presencia del patogeno en la granja.

Infecciones primarias o secundarias: PRRS, Actinobacillus pleuropneumoniae, Influenza o Aujeszky.

Necesidad de medicacion continua en el pienso.

Mortalidad superior al 4%.

Costes de vacunacion.

COLIBACILOIS (Escherichia coli)

La inmunidad de las madres es fundamental para proteger adecuadamente a los lechones desde el momento del nacimiento. La mejor forma de conseguir esto es facilitar la aclimatacion de las cerdas, antes de su primera cubricion, a los patogenos autoctonos de la granja, para que puedan desarrollar anticuerpos frente a ellos y puedan transmitir la inmunidad pasiva a sus lechones. Vacunando a las cerdas se intenta proteger a los lechones a traves del calostro.

La vacunacion de las cerdas frente a E. coli es mucho mas rentable que el tratamiento de los lechones infectados, al margen de la dificultad que conlleva al tratarse de animales tan pequeños. Para ello vacunaremos a las cerdas multiparas 2.-3 semanas antes de la fecha prevista de parto. En el caso de las primiparas efectuaremos una primera vacunacion 6-7 semanas antes del parto y aplicaremos una segunda dosis a las 2-3 semanas del parto.

Las vacunas estan constituidas a base de patogenos inactivados, determinantes patogenos de E. coli, antigenos especificos de enterotoxinas o una combinacion de ellos. En este sentido, la utilizacion de las fimbrias constituye un importante factor de virulencia, al tiempo que poseen importantes propiedades inmunologicas. En la actualidad las investigaciones se centran en las cepas no toxigenicas obtenidas mediante ingenieria genetica con plasmido recombinante que codifica el antigeno F4.

A la hora de elegir un tipo u otro de vacuna hemos de tener en cuenta que la vacuna posea antigenos contra toxinas y componentes estructurales de E. coli, de esta manera, aseguramos el mayor espectro antigenico posible.

La vacuna se aplica via intramuscular en la region del cuello detras de las orejas.

Al margen de la inmunidad que puede trasmitirles la cerda a traves del calostro podemos vacunar a los lechones durante la lactancia para prevenir la Colibacilosis post-destete. Para ello vacunaremos a los lechones el dia 10 de vida y revacunaremos el dia del destete.

La inmunizacion mediante la vacunacion es el metodo mas rapido y facil para estabilizar una granja. En efecto, la mejor estrategia para el control del PRRS es conseguir que la totalidad de la poblacion animal sea inmunologicamente estable frente al virus del PRRS y mantenga ese estatus a lo largo del tiempo.

La gran dificultad de la vacunacion estriba en la gran variabilidad intrinseca del virus, ademas de que el propio virus del PRRS no desarrolla una respuesta rapida protectora. Por ello el control de la enfermedad mediante el empleo de vacunas no es del todo efectivo, pero si que la vacunacion de los animales reduce la susceptibilidad. La efectividad de la vacunacion dependera, fundamentalmente, de la proximidad genetica entre el virus infectante de la granja y el utilizado en la vacuna. Lo ideal seria producir la vacuna con la misma cepa especifica que ha aparecido en la granja en particular. Hoy en dia se esta trabajando en la elaboracion de vacunas mas eficaces para evitar estos problemas derivados de la gran variabilidad genetica del virus del PRRS, por lo que el futuro parece ser optimista, en el sentido de obtener vacunas con una proteccion universal.

Se pueden emplear tanto vacunas atenuadas como vacunas inactivadas e, incluso, en algunos paises se utilizan vacunas autogenas. Las vacunas vivas atenuadas tienen el inconveniente de que tienen capacidad infectante, pueden pasar a cerdas seronegativas o al feto, en el caso de cerdas no inmunes gestantes en el ultimo tercio de la gestacion, desarrollando la enfermedad. Asi mismo, los verracos pueden transferir el virus a traves del semen, aunque siempre en menor medida y duracion que el virus de campo. Por su parte, las vacunas inactivadas no producen viremia ni se transmite entre los animales. En general, la bibliografia cientifica consultada ofrece mejores resultados cuando se utilizan vacunas vivas atenuadas que cuando se utilizan inactivadas. Algunos autores recomiendan el uso de vacunas vivas atenuadas en granjas con brotes agudos o durante los procesos de estabilizacion. Una vez finalizado este primer programa se pueden utilizar vacunas inactivadas para el mantenimiento.

El programa de vacunacion debe ir acompañado de un cuidadoso examen del perfil serologico de los animales.

A pesar de las dificultades anteriormente señaladas, la vacunacion es una herramienta util para el control del PRRS, planteandose la inmunizacion como una opcion temprana respecto a la edad estimada en que los animales pueden infectarse.

En cerdas multiparas se puede aplicar el programa de vacunacion en cualquier fase del ciclo, normalmente se acude a una vacunacion en sabana al inicio del programa (2 dosis con un intervalo de 3-4 semanas). Puede hacerse con vacuna viva o inactivada. Posteriormente, se revacunaran con una dosis el dia 60º-70º de gestacion.

Las cerdas nuliparas se ha de intentar que esten inmunizadas antes de su primera gestacion, de ahi que se las vacune antes de su primera cubricion (2 dosis con un intervalo de 3-4 semanas, la segunda dosis al menos 3 semanas antes de la primera inseminacion). Si las nuliparas son serologicamente positivas a PRRS una dosis unica seria suficiente. Esta vacunacion llevada a cabo durante el periodo de adaptacion sanitaria y/o cuarentena es una buena opcion, porque disminuye la susceptibilidad aunque no ofrece una garantia absoluta, por ello seria necesario realizar serologias a los 14 dias para ver si han sido correctamente vacunadas. La primera inmunizacion debe realizarse siempre con una vacuna viva.

Los lechones tambien se pueden vacunar pero teniendo en cuenta que necesitan al menos 3-4 semanas para el desarrollo de la inmunidad. Se recomienda la vacunacion de los lechones en granjas estables frente a PRRS cuando aparece un brote tras las 6-7 semanas de edad, si los lechones se infectan antes, el exito de la vacuna sera probablemente escaso.

Existe una serie de factores que pueden influir en el fracaso del programa vacunal como pueden ser:

Diferencia de cepa del virus circulante en el granja y el de la vacuna.

Situacion sanitaria de la granja.

Genetica y categoria del animal.

Sistema de manejo.

Presencia de otras enfermedades secundarias.

Aplicaciones de otras vacunas.

Presencia de anticuerpos maternales en el lechon.

CIRCOVIROSIS (Circovirus porcino tipo 2 −PCV2−).

El exito de la vacunacion frente a circovirus porcino tipo 2 dependera en buena medida de acciones tales como un correcto diagnostico de la enfermedad, un buen manejo de los animales o un correcto control de factores de riesgo o de enfermedades concomitantes.

Actualmente, la vacunacion de cerdas consigue aumentar los titulos sericos de anticuerpos frente PCV2, reduce la viremia y la excrecion de virus, tanto en leche como en calostro y mejora los parametros productivos, en el sentido de disminuir la tasa de mortalidad de lechones lactantes y aumentar la ganancia media diaria.

Las vacunas comerciales presentes en nuestro pais se basan en cepas de PCV2a, aunque han demostrado una evidente proteccion cruzada frente a PCV2b, siendo aplicadas tanto en lechones como en cerdas reproductoras. Las vacunas en lechones se muestran eficaces en presencia de anticuerpos maternales debido al hecho de que la eficacia de la vacuna frente a PCV2 no solo depende del desarrollo de la respuesta humoral sino tambien celular, no obstante hay que evitar vacunar cerdas y lechones al mismo tiempo. Por su parte la vacunacion de las cerdas reproductoras puede estabilizar la tasa de anticuerpos en suero y en calostro, potenciando la inmunidad de la granja, ello provocaria una mayor transferencia de inmunidad pasiva a los lechones con la consiguiente mejora en la salud y productividad, asi como una reduccion en la presion de la infeccion.

En lineas generales, la primovacunacion en nuliparas se hara al menos dos semanas antes de la inseminacion con dos dosis de vacuna con un intervalo de 3-4 semanas. La revacunacion se hara 2-4 semanas antes del parto con una dosis. Por su parte, los lechones se vacunaran con una edad minima de 3 semanas, utilizando una segunda dosis tres semanas mas tarde. En cualquier caso la vacunacion de los animales y que tipo de animales se han de vacunar va a depender un poco de las caracteristicas de la infeccion en la granja. En este sentido, la existencia de seroperfiles puede determinar la presencia de anticuerpos maternales y si la infeccion por PCV2 es temprana o tardia, en cuyo caso si es temprana se debe vacunar a las madres para controlar la enfermedad y si es tardia se puede plantear la opcion de vacunar a los lechones. En este ultimo caso hay que vacunar a los lechones tres semanas antes de la infeccion y siempre sobre animales sanos.

Se ha de evitar la vacunacion de los animales cuando exista recirculacion de otras infecciones, en especial PRRS.

La vacunacion utilizando vacunas marcadas con gE negativa es de obligado cumplimiento en nuestro pais. El empleo de vacunas vivas atenuadas induce los mayores niveles de proteccion. No obstante, ninguna vacuna viva o inactivada produce una inmunidad permanente y son necesarias dosis de recuerdo. Cuando el protocolo de vacunacion es llevado a cabo correctamente y en las condiciones adecuadas se va a conseguir una incidencia menor de nuevas infecciones y una menor posibilidad de reactivaciones, disminuyendo progresivamente la circulacion del virus y la prevalencia, hasta unos niveles que van a posibilitar su eliminacion.

Las cerdas reproductoras se vacunaran en sabana 3-4 veces al año.

Durante la recria de futuras reproductoras es imprescindible detener la circulacion del virus durante la fase de cebo. Para ello se aplicaran dosis: a las 10ª-12ª semanas y a las 13ª-16ª semanas. Posteriormente hay que revacunar antes de la primera cubricion: a las 21ª-24ª semanas y una segunda dosis tres semanas mas tarde.

Cuando se adquieran nuliparas del exterior estas deben ser negativas, comprobando su estado sanitario mediante serologia durante el periodo de cuarentena. En este caso las nuliparas deben vacunarse antes de la primera cubricion (dos dosis, con un intervalo de 3 semanas). Si existe riesgo de infeccion deben vacunarse nada mas llegar a la nave de cuarentena.

Los animales de cebo se vacunaran con dos dosis a las 10-12 semanas de vida y una 2ª dosis a las 3-4 semanas de la primera. Si no se lleva a cabo un sistema de todo dentro/todo fuera sino un sistema continuo es aconsejable efectuar una tercera dosis a las 3-4 semanas de la segunda. A la hora de efectuar la primovacunacion es conveniente conocer la cinetica de los anticuerpos maternales mediante la realizacion de seroperfiles, ya que estos pueden impedir la multiplicacion de la cepa vacunal. Por otra parte, la primovacunacion suele efectuarse al inicio del cebo, momento que coincide con una fase de gran estres (transporte, mezcla de animales, peleas y luchas, establecimiento de la jerarquia social, nuevo ambiente, cambio de alimentacion, etc.) aspecto que habra que tenerlo en cuenta, ya que no solo puede afectar a la eficacia de la vacuna sino tambien al propio rendimiento de los cerdos.

Los verracos se vacunaran durante su etapa de crecimiento de forma similar a los animales de cebo. Posteriormente se revacunaran todos los años.

El exito de la vacunacion radica en lo siguientes aspectos:

Estricto control del programa de vacunacion para que los animales esten perfectamente vacunados.

Control de la negatividad de la reposicion y de los animales de cebo.

Ausencia de anticuerpos maternales en el momento de la vacunacion de los lechones.

Introduccion de nuliparas seronegativas: doble serologia a la entrada y salida de la cuarentena.

Control de los factores de riesgo: movimiento de los animales, semen, transporte de vehiculos, etc.

Establecimiento de un programa de bioseguridad.

PLEURONEUMONIA PORCINA (Actinobacillus pleuroneumoniae)

La vacunacion de los animales disminuira el porcentaje de mortalidad y la extension de las lesiones pulmonares; sin embargo, no impide la infeccion ni la elimina de los animales ya infectados. Debido a la presencia de 15 serotipos de A. pleuroneumoniae no existe una vacuna efectiva al 100%, por lo que el aislamiento e identificacion de la cepa circulante en la explotacion en cuestion es de vital importancia para decidirnos por una vacuna comercial u otra o bien para proceder al uso de bacterinas especificas de los serotipos aislados.

La mayor efectividad se consigue con vacunas de subunidades, basadas en la purificacion de toxinas (ApxI, ApxII, ApxIII) y algunas proteinas, ya que suelen proteger contra todos los serotipos.

La serologia puede utilizarse para determinar en que momento los animales se infectan y decidir en que momento se vacunaran a los lechones.

Se aplicaran dos dosis con un intervalo de 4 semanas, entre la 6ª y la 10ª semana de vida de los lechones.

Las cerdas reproductoras se pueden vacunar durante la gestacion cuando la incidencia de la enfermedad es alta.

PARVOVIROSIS/MAL ROJO (Parvovirus/Erysipelotrix rhusiopathiae)

La vacunacion permite un control efectivo de las enfermedades, ya que gracias a la vacunacion de las reproductoras se consigue transferir inmunidad pasiva a traves del calostro con una duracion de 6 meses.

Se pueden emplear vacunas simples, es decir, solo frente a la Parvovirosis, o bien, polivalentes, efectivas frente a parvovirus y otro patogeno bacteriano, generalmente Erysipelotrix rhusiopathiae y/o Leptospira spp. Esta ultima vacuna tiene la ventaja de someter a la cerda a un menor estres, facilitandose el manejo y el ahorro de mano de obra.

Las nuliparas deberan ser vacunadas por primera vez a partir de los 6 meses, para impedir la interferencia entre la inmunidad pasiva y el programa vacunal. El programa vacunal basico tiene que estar completado por lo menos dos semanas antes de la primera cubricion, para que de tiempo a que se produzca la respuesta inmune. Se aconseja aplicar dos dosis de vacuna antes de la primera cubricion.

Las cerdas multiparas se vacunaran en todas las gestaciones, ya que la inmunidad vacunal es de periodo limitado.

Programa vacunal polivalente: parvovirus/ Erysipelotrix rhusiopathiae.

Nuliparas: 2 dosis con intervalo de 3-4 semanas durante el periodo de recria cuarentena/adaptacion sanitaria antes de su entrada en la explotacion. La segunda dosis se debe aplicar entorno a los 7 meses de edad y, al menos, 1-2 semanas antes de la primera cubricion.

Multiparas: 1 dosis a los 10-15 dias post-parto durante la lactacion, o lo que es lo mismo, unas 2-3 semanas antes de la siguiente cubricion.

Verracos: primovacunacion a partir de los 6 meses de edad y, al menos, 1-2 semanas antes de su primera monta. Revacunacion anual.

INFLUENZA PORCINA (virus de la Influenza tipo A)

La vacunacion se puede plantear en funcion del momento de la infeccion de la granja: vacunacion preparto, post.parto o, incluso, en sabana. La vacunacion durante la gestacion proporcionara inmunidad pasiva al lechon a traves del calostro, la cual suele durar hasta el inicio del cebo (semana 12ª-13ª de vida); si bien es verdad que algunos lechones pueden infectarse durante el periodo de transicion, esta infeccion es inversamente proporcional a la cantidad de anticuerpos calostrales recibidos de la cerda. Si existe riesgo de infeccion durante el cebo habra que vacunar a los animales.

Para la vacunacion frente a Influenza habra que tener en cuenta una serie de aspectos como son:

Tipificacion del virus.

Serologia de las cerdas nuliparas durante la cuarentena/adaptacion sanitaria. En las granjas que hayan sufrido un brote de Influenza, las nuliparas deberan ser vacunadas durante la cuarentena, aplicando dos dosis, la ultima, al menos, 3 semanas antes de su introduccion en la nave de gestacion.

Se recomienda vacunar cuando se produzcan episodios epidemicos en la zona.

Cuando aparezca un brote de Influenza se recomienda la vacunacion en sabana de las cerdas reproductoras, aplicando una segunda dosis a las 3 semanas. En estos casos tambien se puede optar por la vacunacion de los cerdos en crecimiento, tanto en transicion como en cebo, de manera que se reduzca la presion de la infeccion. Despues de este protocolo intensivo, se vacunaran a las cerdas de forma rutinaria 30 dias antes del parto, pudiendose establecer una pauta vacunal en los lechones destetados.

Se puede llevar a cabo el siguiente programa vacunal:

Nuliparas: 2 dosis (intervalo aproximado de 3 semanas), la primera 40-50 dias antes del primer parto y la segunda 30-21 dias antes del primer parto.

Multiparas: 1 dosis antes de los 30 dias de la fecha de parto.

Lechones: 2 dosis (intervalo de 3 semanas), la primera dosis a partir de los 30-40 dias de edad.

Cebo: 2 dosis (intervalo de 3 semanas), la primera dosis a la entrada de cebo.

Verracos: 2 dosis (intervalo de 3 semanas). Revacunacion cada 6 meses.

ENFERMEDAD DE GLASSER (Haemophilus parasuis)

Para controlar la enfermedad y evitar la muerte de los lechones en transicion se puede utilizar tanto vacunas comerciales como autovacunas. La vacunacion es especifica del serotipo, siendo el mas utilizado del serotipo 5 (vacuna muerta).

Cuando se observe la infeccion sistemica en la 1ª-3ª semanas post-destete, se debe vacunar a las cerdas 2-4 semanas antes del parto. En algunos casos se puede vacunar tambien a los lechones aunque puede haber interferencia entre los anticuerpos maternales y los vacunales.

Cuando el pico de mortalidad se observe hacia la 4ª-6ª semanas post-destete, coincidiendo con la disminucion de la inmunidad pasiva, se recomienda la vacunacion de los lechones en el momento del destete, revacunandolos 2-3 semanas mas tarde.

Actualmente se pretende identificar factores de virulencia de H. parasuis que puedan ser susceptibles de ser incluidos en futuras vacunas.

RINITIS ATROFICA (Pasteurella multocida, Bordetella bronchiseptica)

Vacunacion de las cerdas reproductoras transfiriendo la inmunidad pasiva a los lechones a traves del calostro. En algunos casos se puede plantear la vacunacion de los lechones.

En las nuliparas se aplicaran dos dosis (intervalo 3-4 semanas), la segunda dosis 15-30 dias antes del parto. Las cerdas multiparas se vacunaran (1 dosis) 15-30 dias antes del parto.

Cuadro 1.

Programa vacunal de las principales enfermedades porcinas.

Enfermedad

Agente etiologico

Tipo de vacuna

Via de administracion

Categoria animal

Programa

Ileitis Lawsonia intracellularis Viva atenuada Oral en el agua de bebida Lechones Vacunacion 3ª-4ª sem. Post-destete

Vacunacion 6 semanas antes de la seroconversion

Neumonia Enzotica Mycoplasma hyopneumoniae Inactivada Intramuscular Lechones Monodosis: 3ª sem. de vida

Dos dosis: 1ª sem y 3ª sem. de vida.

Colibacilosis Escherichia coli Inactivada

Enterotoxinas

Antigenos fimbriales. Intramuscular Reproductoras

Lechones Nuliparas: dos dosis (6-7 semanas antes del parto y 2-3 semanas antes del parto)

Multiparas: una dosis (2-3 semanas antes del parto)

Lechones: dos dosis (dia 10º y dia del destete).

PRRS Arterivirus Viva atenuada

Inactivada Intramuscular Reproductoras

Lechones Nuliparas: dos dosis antes de su primera cubricion, con un intervalo de 3-4 semanas.

Multiparas: primovacunacion igual que nuliparas. Revacunacion: 60º-70º dia de gestacion.

Lechones: 6ª-7º-semana de vida.

Aujeszky Herpesvirus Viva atenuada gE- Intramuscular Reproductoras

Verracos

Cebo Multiparas: en sabana 3-4 veces al año.

Nuliparas: dos dosis a la 10ª-12ª sem. y a la 13ª-16ª sem. Revacunar antes de la primera cubricion: 1ª dosis a la 21ª-24ª sem. y 2ª dosis a las 3-4 semanas.

Cebo: dos dosis a la 10ª-12ª sem. y a la 13ª-16ª sem.

Verracos: primovacunacion igual que en cebo. Revacunar cada año.

Pleuroneumonia Porcina Actinobacillus pleuroneumoniae Viva atenuada.

Subunidades ApxI, II y III. Intramuscular Lechones Dos dosis con un intervalo de 4 semanas entre la 6ª y la 10ª sem.de vida.

Parvovirosis-Mal Rojo Parvovirus/ Erysipelotrix rhusiopathiae Inactivada Intramuscular Reproductoras

Verracos Nuliparas: dos dosis con intervalo de 3-4 semanas. La 2ª dosis hacia el 7º mes de vida y al menos 1-2 semanas antes de la 1ª cubricion.

Multiparas: una dosis 10º-15º dia post-parto.

Verracos: primovacunacion a los 6 meses. Revacunacion anual.

Influenza Porcina Virus de la In-fluenza Tipo A (Ortomixovirus) Inactivada Intramuscular Reproductoras

Lechones

Verracos

Cebo Nuliparas: dos dosis (intervalo aproximado de 3 semanas), la primera 40-50 dias antes del primer parto y la segunda 30-21 dias antes del primer parto.

Multiparas: una dosis antes de los 30 dias de la fecha de parto.

Lechones: dos dosis (intervalo de 3 semanas), la primera dosis a partir de los 30-40 dias de edad.

Cebo: dos dosis (intervalo de 3 semanas), la primera dosis a la entrada de cebo.

Verracos: dos dosis (intervalo de 3 semanas). Revacunacion cada 6 meses

Enfermedad de Glässer Haemophilus parasuis Inactivada Intramuscular Reproductoras

Lechones Reproductoras: 2-4 semanas antes del parto.

Lechones: dos dosis (dia del destete y revacunar 2ª-3ª sem. post-destete.

Rinitis Atrofica Pasteurella multo-cida, Bordetella bronchiseptica Inactivada Intramuscular Reproductoras Nuliparas: dos dosis (intervalo 3-4 semanas), la segunda dosis 15-30 dias antes del parto.

Multiparas: dosis 15-30 dias antes del parto

Circovirosis PCV tipo 2 Inactivada Intramuscular Reproductoras

Lechones Nuliparas: dos dosis (intervalo 3-4 semanas) como minimo dos semanas antes de la primera cubricion. Tercera dosis dos semanas antes del parto.

Multiparas: dos dosis (intervalo 3-4 semanas) como minimo dos semanas antes del parto.

Revacunacion en cada gestacion 2-4 semanas antes del parto.

Lechones ³ 3 sem. Dos dosis intervalo 3 sem.

El veterinario debera planificar el calendario de vacunaciones, decidiendo que vacunas son necesarias y cuales son recomendables, en funcion de las caracteristicas de la explotacion y de la zona; asi se evitara una sobre carga excesiva de trabajo del sistema inmunitario del animal.

Toda utilizacion de vacunas debera ser anotada en el libro de registro de la explotacion destinado a tal efecto. Asi mismo, el veterinario verificara e instruira de forma regular sobre su utilizacion y almacenamiento.

Las explotaciones deben contar con un refrigerador que solo se empleara para fines medicos, en donde se conserven y almacenen las vacunas entre 4 y 8º C hasta el momento de su aplicacion, de esta manera se puede mantener la estructura tridimensional del antigeno.

Durante el proceso de vacunacion someteremos a los animales al menor estres posible. Para ello la vacunacion debe ser previamente programada para contar con el personal suficiente en funcion del censo.

Nunca se debe mezclar la vacuna con otras vacunas, bacterinas, antibioticos, hierro, etc en la misma jeringa, pues se inactiva.

Utilizar siempre una aguja por animal (se puede vacunar a una camada con la misma aguja) y para cada tipo de vacuna, ya que de esta manera se evitara la diseminacion de una posible infeccion y no se contaminara el frasco de la vacuna. Utilizar solo agujas nuevas para extraer el contenido del envase.

Despues de su aplicacion lavar cuidadosamente las jeringas, evitando restos del material biologico. Posteriormente, esterilizar todo el material, jeringa y agujas, si fuese preciso. Las agujas desechables se depositaran en el contenedor habilitado para tal fin. Asi mismo las jeringas de plastico se depositaran en bolsas de plastico, rotuladas en una parte visible con la leyenda «solo jeringas de plastico».

Evitaremos vacunar a los cerdos enfermos y/o mal nutridos, ya que en ocasiones se puede activar en ellos enfermedades ya existentes.

Hay que extremar las medidas de higiene en los propios animales, evitando que la zona de inoculacion este sucia, sobre todo cuando se utiliza la via intramuscular profunda. Las consecuencias son abscesos en el punto de inoculacion, a veces con septicemia y muerte del cerdo.

En el caso de autopinchazo el personal de la granja debera informar al encargado o responsable de la explotacion. Posteriormente, debera ir al centro medico mas proximo donde comunicara el accidente laboral aportando toda la informacion necesaria.