Cultivar legumbres para salvar los suelos

Las leguminosas contribuyen a recuperar y mantener la salud de terrenos degradados, segun un estudio

A veces encontrar una posible solucion es tan sencillo como echar la vista atras. El romano Marco Terencio Varron (116-27 a. C.), hombre de letras y de accion que sobrevivio a Pompeyo y a Julio Cesar, a los azares de la guerra civil y al final de la Republica, ya lo advertia en su tratado agricola De rerum rusticarum. «No es correcto no sembrar nada en la [tierra] magra. En la tierra mas pobre es mas adecuado lo que no necesita mucho jugo, como las leguminosas».

Esa recomendacion de Varron cobra plena actualidad hoy, cuando el 33% de los suelos del mundo se encuentran degradados, termino utilizado para decir que no gozan de buena salud y por tanto no sirven para las actividades que se venian practicando en ellos, como el cultivo. Porque esa cifra incluye el 20% de las tierras de cultivo y el 43% de los pastizales, afectados por fenomenos como la erosion, la salinizacion o la urbanizacion. En el Dia Mundial de los Suelos, la Organizacion de las Naciones Unidas para la Alimentacion y la Agricultura (FAO) ha presentado un informe en el que actualiza los consejos del romano y presenta a las legumbres como un gran aliado en la lucha por restaurar y mantener esos terrenos en buen estado.

El suelo es, en el ambito cientifico, «el medio natural para el crecimiento de las plantas». Es decir, un elemento fundamental de la agricultura y, por ende, de la alimentacion humana. Pero mientras que la escasez de otros elementos basicos —como el agua— es conocida y preocupa, el informe presentado este lunes lamenta que la disponibilidad de suelo sea algo que se suela tener por descontado.

Mas bien al contrario, resalta el informe, el progresivo crecimiento de la poblacion y el cambio en los patrones de consumo (por ejemplo, cada vez se consume mas carne, por lo que hay que producir mas alimento para el ganado) obligan a sacar el maximo partido a cada palmo de terreno. Cada vez hay que producir mas en menos espacio y con menos agua. Y esa presion, que entre otras cosas lleva a utilizar mayores cantidades de fertilizantes siniteticos, tambien pone en riesgo la disponibilidad de suelos.

Por eso la FAO y todo el sistema de las Naciones Unidas llaman a convertir a lentejas, frijoles, guisantes y compañia en un aliado para ese cuidado de las tierras. De ahi que al año internacional de los suelos (2015), le haya seguido ahora el año internacional de las legumbres. Los suelos y las legumbres encarnan una simbiosis unica, ha destacado el director general de la agencia con sede en Roma, Jose Graziano da Silva.

El estudio destaca que las legumbres, ademas de colaborar en la lucha contra el hambre por su gran valor nutricional y su rendimiento —y por ser una fuente de proteinas alternativa a los alimentos de origen animal—, ayudan a mejorar la productividad al tiempo que permiten regular el clima y proteger los ecosistemas. Y, por supuesto, cuidan del suelo.

Las semillas comestibles de las leguminosas pueden (a traves de ciertas bacterias) fijar el nitrogeno atmosferico y hacer solubles los iones de fosfato de elementos como los fosfatos de calcio y hierro. En definitiva, hace que las plantas puedan aprovechar esos nutrientes. Tambien incrementan la cantidad materia organica presente en los suelos, manteniendo la biodiversidad y la salud de los mismos.

Todo esto hace que, cultivando legumbres, haya menos necesidad de utilizar fertilizantes sinteticos (hasta 100 kilos de fertilizante de nitrogeno menos por hectarea). Porque el estudio calcula que los cereales que se cultivan en un terreno en el que antes se plantaron legumbres producen de media 1,5 toneladas mas por hectarea. Y el informe tambien estima el ahorro anual que puede suponer esa fijacion biologica del nitrogeno en lugar de mediante productos sinteticos: unos 10.000 millones de dolares anuales.

Como decia Varron, las legumbres son una buena opcion para aquellos suelos mas pobres o magros. Pero tambien para rotar cultivos y mantener asi la salud de los mas fertiles y ricos. Porque se espera que fenomenos como la urbanizacion sigan en auge, y que para 2050 haya que producir entre un 40% y un 70% mas de alimentos. Es decir, que todavia habra que exprimir mas los suelos. Por eso, concluye el informe, es buena idea aprovechar que estos y las legumbres estan hechos el uno para el otro.