Mosca de la fruta,

 

Mosca de la fruta, de frutales de pepita, Ceratitis capitata Weid


Mosca de la fruta, de frutales de pepita, Ceratitis capitata Weid., las larvas se alimentan de la pulpa que las circunda y excavan galerías que suponen la perdida total del fruto.


Descripción


La mosca de la fruta es un díptero muy polífago que tiene múltiples huéspedes, cultivados o no, lo que favorece su capacidad reproductiva y elevados niveles de población.


Las moscas vuelan y tienen gran capacidad de desplazamiento, y pueden colonizar el cultivo a partir de que los frutos inician su madurez. El adulto mide 4-5 mm, su cabeza es bastante gruesa y de color amarillo. El tórax en su parte superior es de color gris plateado salpicado de manchas negras y formas variadas; los laterales del tórax son de color blanco amarillento. Las alas irisadas con áreas de aspecto ahumado tienen tres líneas anaranjadas, una longitudinal y dos transversales así como numerosas manchas negras sobre el tercio basal. El abdomen es alargado, amarillo parduzco con líneas transversales grises y oviscapto puntiagudo en las hembras.


Los huevos son de color blanco al principio y amarillos más tarde, su forma es ovoide con un tamaño de 1 x 0,2 mm. La larva que mide 7-8 mm, es de color blanco amarillento, apoda, puntiaguda en la parte anterior y truncada en la parte posterior.


Las pupas son de color pardo amarillento con forma de barril.


Mosca de la fruta, de frutales de pepita, Ceratitis capitata Weid


Biología


Pasa el invierno en forma de pupa enterrada entre 1 y 5 cm bajo la copa de los árboles. En las zonas más tempranas al llegar la primavera comienza la emergencia de los adultos aumentando la densidad de manera progresiva; entre 4 y 10 días después de la salida se produce la fecundación que es seguida casi de manera inmediata por la puesta.


Para efectuar la puesta, las hembras eligen frutos próximos a la madurez hundiendo el oviscapto unos milímetros bajo la epidermis o aprovechando alguna pequeña herida ya existente, cada vez la hembra deposita entre 6 y 8 huevos que avivaran en un plazo de 2 a 5 días.


Las larvas completan su desarrollo en un plazo de 10-15 días, transcurridos los cuales la larva retorna a la superficie del fruto y mediante un brusco impulso se deja caer a las grietas del suelo donde pupará. Los nuevos adultos aparecen tras un periodo de 10 a 20 días según las condiciones climáticas.


Síntomas y daños


Inicialmente los daños consisten en una pequeña incisión efectuada por la hembra para depositar los huevos, que se rodea de una pequeña aureola.


Cuando avivan las larvas y comienzan a alimentarse de la pulpa que las circunda excavan galerías que suponen la perdida total del fruto. Cuando las larvas han completado su desarrollo en el interior del fruto, producen pequeños orificios en la epidermis a través de los cuales salen dejándose caer al suelo para pupar. Frecuentemente aparecen podredumbres asociadas a los daños que esta plaga produce.


Periodo crítico para el cultivo


Cuando los frutos inician la maduración.


Seguimiento y estimación del riesgo para el cultivo


Se pueden determinar las poblaciones de la plaga y su evolución, utilizando trampas tipo delta, cebados con feromona (solo se capturan machos) o mosqueros de captura masiva, cargados con atrayentes alimenticios sólidos más un insecticida (se capturan tanto machos como hembras).


Las trampas deben ser revisadas al menos una vez por semana, para confeccionar la curva de vuelo, y disponer de datos objetivos fiables para la toma de decisiones.


Medidas de prevención y/o culturales


Un método cultural que contribuye de manera muy importante a mitigar los daños, consiste en no dejar frutos sin recoger, sacando del campo o destruyendo de manera inmediata tras la recolección los frutos no comerciales.


El embolsado de frutos en bolsas de papel satinado justo después del aclareo es una práctica cultural que limita el ataque de esta plaga si se realiza correctamente.


Umbral/Momento de intervención


Cuando no se hayan instalados métodos alternativos (captura masiva, atracción y muerte…) el umbral se establece en 1 adulto/trampa y día. En el caso de disponer en la parcela de métodos tecnológicos de control el umbral es de 3 adulto/trampa y día.


Medidas alternativas al control químico


Además de los medios señalados en este apartado, para minimizar el uso de los medios químicos, hay que considerar las medidas de prevención y/o culturales, pudiendo ser alternativas al control químico.


Medios biotecnológicos


Es la forma más eficiente de controlar la plaga, para lo que se puede utilizar la técnica de “captura masiva de adultos” o el sistema de “atraer y matar”. En cualquier caso es imprescindible conocer el periodo de tiempo durante el que los atrayentes y los insecticidas que puedan emplearse mantienen adecuadamente su actividad.


En la mayor parte de los casos la dosis de aplicación es de entre 50 y 75 trampas por hectárea, excepto los mosqueros de captura masiva con atrayente líquido, que se utilizan a razón de 100- 120 trampas por hectárea.


Es fundamental que estos sistemas estén instalados desde el inicio del vuelo de los adultos y es aconsejable mantenerlos de la parcela al menos 15 días después de concluida la recolección.


Medios químicos


Se podrán utilizar los productos fitosanitarios autorizados en el Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.


Pueden realizarse tratamientos químicos a la totalidad de la copa del árbol u optar por realizar tratamientos cebo, utilizando un insecticida mezclado con proteína hidrolizada que actúa como atrayente.


En todo caso el producto deberá de estar autorizado para el uso que se haga.


Bibliografía


7.inra.fr/hyppz/species.htm


La defensa de las plantas cultivadas. R. Bovey. Ediciones Omega S.A. Plagas y enfermedades de las plantas cultivadas. F. Domínguez García-Tejero. Ediciones Mundi- Prensa. Peral.


Control Integrado de Plagas y Enfermedades. J.Garcia de Otazo, J. Sió, R. Torá y M. Torá. Agro Latino S.L.


Fuente y referencia: Publicación del Ministerio de Agricultura de España, Guia de Gestión Integrada de Plagas en Frutales de Pepita. Madrid 2014.


Mosca de la fruta, de frutales de pepita, Ceratitis capitata Weid., descripción, daños y control integrado