Nueva enfermedad del trigo

Enfermedad virulenta amenaza a los cultivos de trigo en Europa y África del Norte

Una nueva y altamente destructiva cepa de una enfermedad que azotó las cosechas de trigo en Sicilia el año pasado podría extenderse por todo el Mediterráneo en 2017, amenazando las cosechas y el sustento de los pequeños agricultores, advirtieron expertos.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) instó a los países de Europa y África del Norte a estar atentos para prevenir posibles brotes de la enfermedad por la roya del tallo que se conviertan en epidemias que podrían reducir la producción de alimentos.

En 2016 miles de hectáreas de cultivos de trigo fueron dañadas en Sicilia en uno de los mayores brotes de roya del tallo que golpeó Europa en más de 50 años, dijeron los investigadores.

Un análisis realizado por el Cimmyt y la Universidad de Aarhus de Dinamarca, destacó la revista Nature, encontró que las epidemias fueron causadas por una nueva cepa del óxido del tallo, una infección por hongos que, si no se trata, puede destruir un cultivo completo en pocas semanas.

Las esporas de roya del tallo se propagan por el viento, y en 2017 los hongos podrían afectar las cosechas en países cercanos como Grecia, Albania, Libia y Túnez, advirtieron los investigadores.

Sin embargo, la contaminación no es segura, ya que las esporas podrían no haber sobrevivido a las duras temperaturas invernales de este año, dijeron.

Fazil Dusunceli, patólogo de plantas de la FAO, dijo que la enfermedad es particularmente preocupante para los pequeños agricultores del norte de África, que representan una gran parte de la producción de trigo en la región.

Las primeras aplicaciones de fungicidas son clave para contener los brotes, según la investigación, pero los pequeños agricultores a menudo carecen de dinero o conocimientos para utilizarlos de manera efectiva, dijo.

Un riesgo adicional se planteó por la aparición reciente en algunas zonas de Europa, África y Asia de otras dos nuevas cepas de una infección de trigo diferente, la roya amarilla, aunque su impacto potencial aún no estaba claro, dijo.

Más de mil millones de personas en el mundo en desarrollo dependen del trigo como fuente de alimentos e ingresos, según la FAO.