Principales Tendencias en la Distribucion Alimentaria en los Paises de America Latina

En los últimos 20 años se han evidenciado, a nivel de las empresas encargadas de la distribución alimentaria de casi todos los países de América Latina, importantes cambios que han venido alterando, incluso, el funcionamiento de la totalidad de sus sistemas agroalimentarios. Entre esas variaciones, es necesario destacar las siguientes:

a) el desarrollo de “nuevos” formatos de venta minorista, entre los que destacan los hipermercados y los “supermercados de descuento” ;

b) la creación, expansión y concentración de “grandes” empresas encargadas de la distribución y, sobre todo, el aumento de su importancia económica. Esos aspectos han alterado las condiciones de competencia en ese sector;

c) como resultado de lo anterior, se ha producido el cierre de un número considerable de pequeños y medianos establecimientos, que no han tenido la capacidad para adaptarse a las “nuevas” condiciones del mercado; aspecto que junto con el anterior, modificó la estructura del comercio minorista de alimentos en la mayoría de nuestros países;

d) el aumento de la variedad de productos alimentarios disponibles en los establecimientos comerciales;

e) el incremento de la importancia de los productos “frescos” dentro de los establecimientos “modernos” de la distribución;

f) el desarrollo y expansión de las denominadas “marcas propias” o “marcas exclusivas” en productos alimentarios,  fundamentalmente en los establecimientos pertenecientes a la denominada Gran Distribución;

g) un notable aumento, en los establecimientos “modernos”, de la variedad de servicios ofrecidos a los clientes;

h) la conjunción de establecimientos comerciales de venta de alimentos con otro tipo de empresas tales como bancos,  cines, farmacias, entre otros;

i) un mayor uso de las herramientas informáticas para el manejo de los establecimientos, de los inventarios, de la
administración de los puntos de venta y de la logística en general, y,

j) una coordinación más estrecha con los proveedores más importantes

Es necesario resaltar que lo más impresionante de los referidos cambios que se han presentado en la distribución alimentaria en estos países, es que procesos semejantes se llevaron a cabo en los países europeos y en Estados Unidos prácticamente en un lapso de cinco siglos, mientras que en nuestros países han alcanzado una considerable intensidad en apenas unos quince años, ocurriendo en forma similar en la mayoría de los países latinoamericanos, con diferencias temporales relativamente pequeñas.

La importancia de esos cambios en la distribución minorista de alimentos en estos países ha sido tal, que de manera
progresiva los agentes económicos de ese sector productivo han venido desplazando a la agroindustria como “dinamizadores”  del sistema agroalimentario, transformándose paulatinamente, en el “componente” que “hala” al resto del sistema.

Ese “protagonismo” de los agentes de la distribución alimentaria, se ha reflejado no sólo a través de la imposición de muchas condiciones de negociación a los demás agentes económicos del sector, sobre todo de aquellas relacionadas con la  calidad de los productos, las condiciones de aprovisionamiento y el establecimiento de los plazos de pago, sino además,  por el incremento en las últimas dos décadas, de la importancia relativa del “Componente Transporte, Almacenamiento y  demás funciones de la Comercialización”, cuyos agentes han logrado captar una parte creciente del gasto de consumo  alimentario, tanto para productos “frescos” como para aquellos productos que son procesados.

El progresivo movimiento del “centro de poder” del sistema agroalimentario, desde la agroindustria hacia los agentes
más próximos a los consumidores, cobra mayor importancia si se toma en cuenta que un número relativamente pequeño de  empresas “modernas”, aquellas pertenecientes a la denominada Gran Distribución, son las que han concentrado gran parte de  ese “poder” de decisión y negociación

Por: Ing. Agr. Ricardo Castillo López. MSc. Dr.