¿Quién Gobierna A Tus Orquídeas?

Todas las orquídeas, sin importar el tipo de crecimiento que tengan y del cual hablaremos más adelante, son gobernadas por los siguientes órganos:
a) Raíces – b) Bulbos, Pseudobulbos y Tallos.
Raíces:
Es un órgano sumamente importante, en él reside prácticamente toda la fortaleza de las orquídeas. Es el órgano que le da Anclaje a Las Orquídeas.

Las raíces de las orquídeas son largas y blanquecinas, con extremos verdosos. La porción blanquecina es la encargada de la absorber los nutrientes que esta planta necesita para crecer y florecer adecuadamente.
La porción verdosa es la zona por donde la raíz crece constantemente. Al mismo tiempo, es la parte más sensible de este órgano, por lo que cada vez que mueves, manipulas o inspeccionas a tus orquídeas, debes cuidar de que esta zona de la raíz no se vea afectada en ninguna forma.
Las orquídeas detestan la inestabilidad… Si, si, como lo oyes, detestan sentirse inestables, tambaleantes. El órgano que provee la estabilidad a las orquídeas no es otro que las raíces.
Ellas se adhieren con mucha fuerza al medio de cultivo o superficie donde se encuentren, de tal manera que mantiene a la orquídea firme en una posición, sin que esté moviéndose constantemente.
Image result for orquideas cattleyaLas orquídeas que no tienen un sistema de raíces fuerte, tienen serios problemas de adaptación al ambiente, se deshidratan con mucha rapidez, pierden el sostén, su crecimiento es lento y la floración pobre y fea.
Ves las consecuencias? Recuerda siempre que las raíces de tus orquídeas son el corazón de ellas.
Este órgano podría sufrir daños debido a un exceso o falta de humedad, debido a un exceso de abono, o a plagas y enfermedades. Cualquiera sea el daño que haya experimentado es importante que lo corrijas pronto para evitar que tu orquídea sufra afectaciones severas que le impidan crecer y florecer como tu esperas.
Muchos de estos daños son irreversibles por lo que debes mantenerte revisando tus orquídeas periódicamente para detectar cualquier anomalía en sus raíces.
Cuando las raíces de las orquídeas se ven afectadas, el resto de los órganos también lo estará. Recuerda que es a través de las raíces que las orquídeas reciben casi la totalidad de los nutrientes, de manera que si este órgano no puede “comer” las otras partes de la planta empezarán a sentirlo.
Pero… ¿Cuáles son los esos síntomas que podría mostrar las orquídeas cuando tienen problemas en sus raíces?
Si por alguna razón (plagas, enfermedades, humedad, abono) las raíces comienzan a afectarse, observarás que las hojas de tus plantas empiezan a motearse, a ponerse amarillas o a secarse desde la punta hacia adentro de la hoja. Este es un síntoma muy claro de que algo no anda bien en las raíces de estas plantas.
Por otro lado, notarás que los bulbos, pseudobulbos o tallos (los veremos más adelante en esta lección) también reaccionan ante un daño en las raíces, verás que comienzan a secarse, a consumirse. Si observas detenidamente, verás que la superficie de los bulbos quedan cubiertos por unas estrías que indican una evidente falta de agua y humedad general.
Si te fijas en las flores de las orquídeas que tienen problemas en las raíces, notarás como estas se marchitan más rápido y mueren antes de la hora.
Lo ves… ¿Ves porqué es importante que cuides las raíces de tus orquídeas y que entiendas porque tienes que tomarlas en cuenta antes de pensar poner en práctica, cualquier consejo o truco que te hayan dado?
Ellas gobiernan lo que tu orquídea va a comer y a beber.
A través de las raíces se absorbe casi toda el agua y la comida.
Si ella no funciona y no puede regenerarse, Tu Orquídea Morirá.
Puede que tengas las mejores orquídeas, puede que te sepas muchísimos trucos para poner en práctica, pero nada de esto tendrá sentido si anteriormente no has interiorizado que las raíces de tus orquídeas lo definen todo, que si ellas sufren un daño severo, será muy poco lo que puedas hacer para salvarlas, inclusive si cuentas con una orquídea robusta, salvaje y bien adaptada a cualquier ambiente.
Bulbo, Pseudobulbo o Tallo
Este órgano gobierna las reservas de tu orquídea y determina si disfrutarás o no de las bellas flores de esta planta.
Puede recibir cualquiera de estos nombres dependiendo del tipo de crecimiento que tenga la orquídea en particular de la que estemos hablando.
Lo importante aquí es que este órgano se encarga de almacenar gran cantidad de nutrientes que fueron producidos por las hojas. Estos nutrientes se distribuyen por toda la planta y una cierta cantidad de ellos queda en reserva para alimentar a los hijos nuevos.
En el bulbo, pseudobulbo o tallo se encuentran, en potencia, las flores de las que más tarde disfrutarás, una vez se hayan desarrollado; y la continuidad de tu orquídea…
¿Cómo es eso de la …continuidad de tu orquídea…?
Recuerda que te mencioné que las orquídeas NUNCA MUEREN. Pues bien, cada bulbo o pseudobulbo de orquídea tiene una zona en su base a partir de la cual se originará un nuevo hijo, en el momento preciso.
Este hecho es de suma importancia para ti, ya que debes cuidar por todos los medios que esta zona, mejor conocida como “ojo de la orquídea”, no se afecte, se dañe o se seque por algún motivo. Si esto le llegara a pasar, perderías la continuidad de tu planta.
Algunas veces, aunque no quieras, esto puede sucederte, sobre todo al inicio…Cuando aún no has aprendido bien los cuidados que necesitan las orquídeas, y las manipulas con cierta rudeza y poco cuidado.
Aún así, no todo está perdido. Una vez más, recuerda que las orquídeas son las plantas más evolucionadas del planeta.
De tal forma que cuando el “ojo de la orquídea” está afectado y no puede producir un nuevo hijo, el instinto de perpetuidad de estas plantas la llevará a producir hijos aéreos los cuales garantizarán, aunque de otra forma, la continuidad de esta planta. ¡Fabuloso! Verdad?
La capacidad y la frecuencia con estos hijos aéreos se forman depende mucho de la especie de orquídea de la que se trate. No todas lo hacen en igual medida.
Ya sean hijos aéreos o verdaderos (nacidos del ojo), el bulbo, pseudobulbo o tallo deberá cumplir la gran misión de alimentar a esa nueva orquídea que se está formando. De ahí que este órgano sea una reserva de alimento y la gran importancia de que el mismo esté en perfectas condiciones.
Algunas veces, los bulbos, pseudobulbos o tallos sufren pudriciones y ataques de plagas que deberás controlar efectivamente, para evitar que tu orquídea desmejore sustancialmente su salud y vigor.
Las pudriciones son fatales para este órgano, pudiendo llegar a ser tan severas que terminen con la total desaparición del bulbo, pseudobulbo o tallo afectado. Algunas plagas como los picudos y la broca son igualmente dañinas ya que abren orificios en este órgano, dando paso a que se infecten con hongos, bacterias y virus muy peligrosos.
Tanto las raíces como los tallos, pseudobulbos o bulbos gobiernan la vida de tus orquídeas. Los cuidados de tus orquídeas, así como cualquier consejo o truco que pongas en práctica debe estar siempre enfocado en tratar de mantener a estos dos órganos en perfectas condiciones y con muy buena salud.
De otro modo, si los descuidas, si permites que sufran por el exceso o falta de agua, si le aplicas un abono inadecuado o si te das el lujo de no inspeccionarlas para prevenirlas a tiempo de las plagas y las enfermedades que la rondan; es muy probable que tanto las raíces como los bulbos se afecten tan seriamente que te expones a perder completamente a tus orquídeas.
Recuerda siempre que las raíces son la vía principal de comida para tus orquídeas y que en el bulbo, pseudobulbo o tallo se almacena la comida y está el potencial de ellas para producir las flores que serán el elemento decorativo más importante de tu colección de casa o jardín.
Ahora que estás consiente de a quienes tienes que cuidar y las razones que existen para esto, tienes todas las herramientas para comenzar a aprender a cuidar a tus Orquídeas. Comenzaremos a verlo desde la próxima lección.
Mantente atento a tu buzón de correo electrónico, porque mañana recibirás un mensaje con el enlace a la segunda lección de este e-curso para aprender a cuidar tus Orquídeas, haciendo que estallen por la belleza de sus flores y su follaje.