Como diseñar un huerto

A la hora de comenzar un huerto, hay que detenerse un poco en su diseño. Ya se que la palabra diseño aplicada a un huerto suena raro, pero lo cierto es que, si nos tomamos un poco de tiempo antes de meter la azada o el motocultor, conseguiremos crear un sistema eficaz, facil de mantener y conservar y lo mas armonico posible con el entorno en que se halle.

Hay muchos puntos de vista sobre cual es el mejor sistema de cultivo natural. En este aspecto –como en muchos otros de la vida- cada persona aporta sus ideas y sus experiencias y, por lo tanto, lo mas sabio (en mi humilde opinion) seria conocer tantas como sea posible y adaptarlas a nuestro caso en concreto.

sobre casi cualquier tema y, logicamente, la agricultura natural no es una excepcion. A veces, este «exceso» de informacion hace que algunas personas acaben un poco hartas, se lien la manta a la cabeza, y acaben por hacer las cosas de cualquier manera, despues de haber leido informaciones a veces incompletas, a menudo casi contradictorias y, en muchas ocasiones, inadecuadas para su situacion particular.

Lo que voy a tratar de hacer es señalar algunos aspectos fundamentales a la hora de diseñar el huerto y resumir la informacion mas relevante en este sentido.

Podemos empezar por hacernos algunas preguntas:

1. Que tamaño de huerto vamos a cultivar?

2. Con que fin? (Consumo propio, fines educativos, venta…)

3. De cuanto tiempo disponemos para atenderlo?

4. De que herramientas disponemos? Aqui debemos incluir tambien nuestros conocimientos, por supuesto

Para ir entrando en materia, vamos a plantearnos dos alternativas, una en cada extremo:

* Huerto pequeño (maximo 300 metros cuadrados)

* Huerto grande (De 300 m2 hasta 3 hectareas)

Esta claro que segun que alternativa elijamos, ella misma nos pedira cosas muy distintas; por ejemplo, es raro que alguien se plantee (aunque sea vegetariano estricto y por muchos cuñados que tenga) plantar 1.000 metros cuadrados unicamente para consumo propio. Por la misma razon, si solo puedes dedicar el fin de semana, yo que

tu me lo pensaria antes de cultivar dos hectareas.

En cualquier caso, se trate de 100 metros o de 30.000 habra varias cosas que si tendremos que tener muy en cuenta:

* Calidad del terreno

* Orientacion

* Cercania a la casa y/o al agua de riego

Calidad del terreno

En el monografico «El suelo de cultivo» veiamos como el suelo (su estructura, su textura, su composicion) condiciona los cultivos que pueden crecer en el. Por lo tanto el primer paso sera averiguar todo lo posible de nuestro terreno antes de dar un solo paso.

En ese mismo articulo, deciamos tambien que un analisis exhaustivo de la tierra estara indicado, unicamente, en aquellos casos en que se trate de una actividad «empresarial» es decir, que cultivamos con la intencion de vender el producto. Si lo que pretendemos es cubrir nuestro propio consumo y poco mas, en principio –y en la mayoria de los casos, aunque no en todos- deberia bastarnos con las indicaciones que nos aportan las plantas (ver cuadros y fotografias en el mismo articulo).

Si necesitamos llevar a cabo un analisis completo de la tierra, la mejor manera es ponerse en contacto con las asociaciones y sindicatos agrarios que, por lo general, disponen o bien de laboratorios o instrumentos propios, o pueden indicarnos a donde dirigirnos para conseguir un buen resultado (Y a un buen precio, que tambien es

importante).

En cuanto a la estructura y textura del suelo, puede bastar con una observacion visual seguida de una pequeña cata, cava o similar, pero, una vez mas, dependiendo de hasta que punto vayamos a involucrarnos a nivel economico, puede ser precisa la asistencia de algun tecnico cualificado que nos evalue con mayor precision cual es la situacion real de nuestro suelo.

Orientacion

En principio parece que no hay mucho que podamos hacer a este respecto, pero si que hay un par de detalles que vale la pena recordar:

* Como lograr la mayor cantidad posible de sol

* Que hacer si se trata de un terreno en pendiente

Aqui si que vamos a marcar una clara diferencia entre los cultivos «industriales» que hacen hincapie, sobre todo, en el monocultivo, y el cultivo natural que trata de diversificar todo lo posible.

En una explotacion «industrial» se aprovecha hasta el ultimo metro cuadrado de tierra, y se tiene poco o nada en cuenta si esta mejor o peor orientada. Lo que le falte de sol, se suple con quimica y punto.

En nuestro caso, lo que buscamos es ir todo lo posible a favor de la naturaleza y, por lo tanto, orientaremos nuestro huerto de tal manera que las horas de sol se prolonguen cuanto mas, mejor. Esta claro que es imposible hacer un diseño que sirva para todos los casos, pero teniendo esa premisa en cuenta, sera dificil que nos

equivoquemos.

1 Semillero ; 2 Hortalizas ; 3 Frutales

La figura 1 corresponde a una distribucion clasica de los distintos elementos que se suelen situar en una parcela. En este caso, la fachada principal de la casa (los bloques rojos) corresponde a la orientacion norte, y por tanto toda esa zona se ha destinado a plantas ornamentales, mientras que la parte trasera esta ocupada por las plantaciones de hortalizas y frutales.

En la figura 2 se han colocado frutales en la parte delantera y eso modifica ligeramente la distribucion. Como vemos los bancales se colocan en la mejor orientacion posible: norte-sur.

El semillero, en ambos casos, se coloca en una esquina que, ademas de estar protegida, permitiria la construccion de un invernadero si fuese necesario.

Dependiendo del sistema que utilicemos, habra algunas pequeñas variantes pero, si optamos por el mas frecuente y eficaz desde casi todos los puntos de vista, es decir, el cultivo en hojas o bancales (ya sean elevados o a ras de tierra) lo mejor seria orientarlos en sentido longitudinal, de norte a sur. Eso, junto con algunos detalles adicionales a la hora de plantar (las plantas mas altas atras, plantar al tresbolillo, etc.), nos asegura el maximo de insolacion.

En cuanto a los terrenos en pendiente -muy frecuentes en algunos lugares- hay que tener en cuenta que las perdidas de tierra, de fertilidad y de nutrientes, son muy elevadas debido al efecto de arrastre del agua (tanto superficial como a nivel subterraneo), y por ello vale la pena realizar un esfuerzo por mejorar todo lo posible el terreno, usando una tecnica tan antigua como la agricultura misma: el aterrazamiento.

A la izda. podemos ver un cultivo de vid en terrazas, en la Borgoña, en el centro los muros de piedra para formar terrazas en Sudamerica y, a la dcha. las terrazas de arroz en China.

Desde el comienzo de la agricultura, el hombre ha tratado de utilizar todo el espacio disponible, estuviese donde estuviese, de manera que las laderas de los montes no iban a ser una excepcion. Sin necesidad de estudios cientificos, nuestros antepasados vieron que era preciso evitar los corrimientos de tierra, retener la humedad, aprovechar los nutrientes: nacieron las terrazas.

Es cierto que aterrazar una pendiente requiere un esfuerzo, pero no es menos cierto que no se trata de un trabajo que haya que realizar año tras año, sino que, una vez hecho, su duracion es muy prolongada, requiriendo unicamente un poco de mantenimiento anual.

Por otra parte, el cultivo en terrazas nos facilita el diseño de cualquier terreno, su cultivo y su conservacion, porque las areas a cultivar –despues del aterrazamientoson de menor tamaño y, por lo tanto, mas faciles de gestionar. Algunas personas dicen que al aterrazar se pierde mucho terreno debido al desnivel, pero lo que no tienen en cuenta, al afirmar algo semejante, es que, por una parte, la capacidad de la tierra para ser cultivada, aumenta de un modo increible y, por otra, las plantas pueden ir bastante mas juntas porque no habra tanta «lucha» por la nutricion ni la luz. De manera que, al final, no se puede hablar de perdida, sino de todo lo contrario.

Setos

Y, por ultimo, hablaremos de un aspecto no muy frecuente, pero que reviste gran importancia a la hora de diseñar un huerto: los setos.

Por lo general se tiende a considerar los setos como una molestia, que se sobrelleva unicamente por razones esteticas o de privacidad y, por esa razon, se colocan plantas que no solo no aportan nada al entorno, sino que, en muchos casos, son contraproducentes tanto para la vida vegetal como animal.

Un seto bien elegido, es un ayudante fundamental, por ejemplo, a la hora de controlar las plagas, puesto que en el o en su entorno, pueden alimentarse muchos insectos beneficos que seran los eficaces controladores de posibles plagas, pero su labor no acaba ni mucho menos en esa ayuda fitosanitaria. Como «controlador» del clima, su presencia frenara el efecto perjudicial de los fuertes vientos, atemperara las insolaciones o las heladas, mantendra la humedad y evitara las perdidas por erosion debido al efecto de cimentacion que ejercen sus raices.

Pero es que, por si esto fuera poco, esas mismas raices pueden servir de filtro para limpiar la contaminacion contenida en el agua subterranea, impidiendo o disminuyendo significativamente su impacto en nuestros cultivos. Se suele argumentar, como en el caso de las terrazas, la perdida de terreno que supone la plantacion de un seto pero, igual tambien que en caso de las terrazas, sus beneficios son considerablemente superiores a esa discutible perdida.

Para todos aquellos que quieran una informacion mas exhaustiva sobre este tema, les recomiendo visitar la diapositiva sobre «Aspectos practicos del cultivo»en la cual se encuentra el monografico «Los Setos». Ahi encontrareis una lista de las especies mas comunes (con la fotografia correspondiente) y varios datos importantes.

A continuacion pasaremos al siguiente punto: La preparacion del terreno, el cual veremos en una proxima edicion en Agriculturers.com.

Elaborado por Francisco Saenz. milengrama@yahoo.es