Cuidados del césped en invierno

Las heladas nocturnas de los últimos días hacen que el césped se cubra de hielo y amanezca con una capa blanca de escarcha, aportando calma y silencio al jardín.

Si el césped incluye variedades cespitosas resistentes al frío, ofrecerá bastante resistencia a las heladas, aunque para que no sufra daños debemos evitar pisar el césped mientras está escarchado. Por otra parte, conviene mantener la hierba alta para proteger mejor a las raíces del frío.

Si el césped incluye cespitosas sensibles al frío y sufrimos una helada esporádica, un ligero riego romperá la escarcha y evitará que el césped se queme por el efecto de la helada.

En todo caso, una buena idea para proteger al césped frente al frío es aprovechar los meses invernales para extender una capa de abono orgánico sobre la hierba. Podemos aplicar compost, mantillo o estiércol bien maduro, que se irá incorporando lentamente a la tierra favoreciendo el desarrollo del césped la próxima primavera.