Ley de la restitución – Fertilización de cultivos

 

Ley de la Restitución es uno de los Principios generales de la fertilización de cultivos dice que, al finalizar el ciclo de cultivo, el suelo debería conservarse en las mismas condiciones en las que se encontraba al iniciarse, respecto a su contenido de nutrientes.


Según esta Ley de la restitución deben reponerse nutrientes minerales extraidos por las cosechas, con objeto de que no se pierda fertilidad tras las sucesivas campañas.


La restitución al suelo de lo exportado por la cosecha, debe de considerarse desde un punto de vista económico y en cuanto a garantizar la correcta nutrición de la próxima cosecha. La fertilización debe tener como objetivo primordial mantener la fertilidad del suelo, no debiendo limitarse a la restitución de los elementos extraídos por la cosecha.


Restituir las extracciones de las cosechas es necesario, pero no suficiente, por tres razones importantes


1.- Un número importante de suelos tienen una pobreza natural que exige la incorporación de uno o varios elementos nutritivos para ser considerados cultivables y permitir la implantación y desarrollo de los cultivos. 


2.- El suelo está inevitablemente sometido a una serie de fenómenos naturales como la erosión y el lavado que, entre otros efectos negativos para la fertilidad del suelo, originan pérdidas de nutrientes que se suman a las extracciones de las cosechas.


3.- La planta tiene necesidades nutritivas en momentos determinados de su ciclo vegetativo, necesidades instantáneas e intensas, durante los cuales las reservas movilizadas del suelo pueden ser insuficientes.


Ley de la restitución – Principios generales de la fertilización de cultivos.