Siembra de hortalizas en semillero

En lugar de sembrar las semillas de las hortalizas directamente en el exterior se pueden sembrar en recipientes pequeños dentro de un espacio protegido del frío.

La siembra en semillero protegido tiene algunas ventajas:

Permite adelantar la siembra de hortalizas de verano al protegerlas del frío y del viento. En climas fríos con heladas tardías, las hortalizas de ciclo largo como el tomate o el pimiento deben sembrarse en semillero para que puedan dar frutos en verano.Protege a las nuevas plantitas de las malas hierbas favoreciendo sus primeras semanas de crecimiento.Facilita la organización y aprovechamiento del espacio en el huerto.

Todas las especies de hortalizas se pueden sembrar en semillero excepto las hortalizas cuya parte comestible sea la raíz, como ocurre con la zanahoria o el rábano. En estos casos, el trasplante del semillero al huerto exterior podría perjudicar la raíz y la cosecha.

Pasos a seguir para la siembra en semillero

1) Seleccionar recipientes pequeños. En los centros de jardinería podemos encontrar bandejas de plantación, aunque cualquier tiesto pequeño puede servirnos, hasta los envases de los yogures.

2) Preparar el sustrato. Podemos utilizar el mismo sustrato que tengamos en el huerto, un sustrato esponjoso y suelto.

3) Sembrar las semillas. Tras obtener las semillas que queremos cultivar, las sembraremos enterrándolas a una profundidad de una o dos veces el diámetro de la semilla.

4) Regar con frecuencia: Una vez sembradas las semillas, debemos regar a menudo evitando que el sustrato llegue a secarse.

Deberemos realizar el trasplante de las plántulas cuando alcancen la misma altura que el recipiente. Si llegado ese momento consideramos que aún existe riego de heladas en el exterior, podemos cambiar la planta a un recipiente mayor antes de trasplantarlo al exterior