La productividad de la cerda moderna

La productividad de la cerda moderna es, indudablemente, diferente a los resultados obtenidos  con la cerda de hace 30 años, y ello se debe a una serie de cambios que se han venido presentando  en los diferentes campos de la producción porcina , donde juegan un papel de importancia la Genética, la Nutrición, las Instalaciones y por supuesto el Manejo y la Sanidad del rebaño porcino

Cuando hablamos de productividad se deben considerar tres aspectos, los cuales son:

  1. a) Partos por cerda año.
  2. b) Prolificidad.
  3. c) Mortalidad predestete (M.P.D)

Estos tres elementos tiene un gran impacto sobre el número de Lechones/Madre/Año, factor que a su vez tiene una gran responsabilidad sobre el Volumen de Carne por Madre Año, elemento considerado actualmente como indispensable para medir la productividad de una explotación porcina

Partiendo, de estas consideraciones es necesario ir conociendo cada uno de ellos.

  1. a) Partos/Cerda/Año:

Es el número de partos que se pueden obtener de  la hembra en el período de 365 días. Hace 30 años con un período de lactancia de 30 días se lograba 1,2 partos por madre. Actualmente con la ayuda de una adecuada nutrición, buenas y confortables instalaciones y manejo ajustado a los nuevos genotipos existentes se están obteniendo 2,5  o mas partos/madre/año.

Los partos/Madre/Año, tienen íntima relación con la duración de la Gestación, la duración de la Lactancia y el Intervalo Destete Celo.

La duración de la Gestación es un componente biológico que la mano del hombre no ha podido modificar, y tiene una duración de 114 a 116 días.

La duración de la lactancia es el período en que la hembra provee de alimento (leche) a sus lechones y por lo general es de 21 días, aunque en la actualidad los productores europeos están volviendo a una lactancia de 25 días. Esta decisión del productor europeo de sacrificar días se debe a que la tasa de repeticiones en hembras que eran destetadas con un promedio de 21 días de lactancia, se hacía cada vez mayor, y ello se debe a que el período de la involución uterina debe ser mayor a 19 días.

En la actualidad existe un consenso general que al reducir el período de lactancia se presenta una reducción igualmente importante en el número de lechones nacidos. Existen investigaciones donde se demuestra que el tamaño de la camada fue menor en hembras con períodos de lactancia inferiores a 17 días (Koketsu y Dial, 1997). La involución uterina es el período que tarda el útero en volver a estar en condiciones para alojar los óvulos o huevos fecundados. Un período menor a 19 días hace que las paredes uterinas aun no se encuentren aptas para fijar estos huevos, lo cual genera en el mejor de los casos un alto número de huevos fecundados que son reabsorbidos, provocando bajo número de lechones por camada o repeticiones de celo a los 21 días.

El Intervalo Destete Celo , viene a estar sometido a un serie de aspectos donde intervienen:.

  1. El Intervalo Destete Celo.
  2. Intervalo Celo Servicio efectivo o concepción.

Este aspecto tiene gran importancia en los Días No Productivos de la Cerda (DNP)

Igualmente ese intervalo actúa sobre los resultados en las cubriciones, ya que un intervalo superior a 7 días impacta sobre las cubriciones que se han presupuestado para la semana o mes.

El Intervalo Destete Celo nos sirve para monitorear la calidad de alimentación que esa hembra tuvo en la sala de maternidad y en el manejo del recelo que se efectúa en la granja. Existen una serie de factores a tener en cuenta en el Intervalo Destete Celo, los cuales influyen negativamente en él, estos son:

  1. Consumo inadecuado de alimento durante la lactancia.
  2. Temperatura de la sala de maternidad.
  3. Época del año.
  4. Duración de la Lactancia inferior a 17 días.

Cosgrove y colaboradores (1997), manifiestan que si se moviliza demasiada masa proteica (catabolismo durante la lactancia)  se puede perjudicar el crecimiento de los lechones pero sobretodo el futuro reproductivo de la hembra. También consideran que existe una relación curvilínea entre la pérdida de masa proteica que superen el 10%  y el intervalo destete-celo.

  1. b) Tasa de Prolificidad.

La tasa de prolificidad está supeditada a los siguientes elementos:

  1. Tasa de ovulación.
  2. Tasa de fertilización.
  3. Mortalidad embrionaria o fetal.
  4. Pérdidas en el parto.

El ovario de la cerda en el momento de la ovulación expulsa aproximadamente 20 huevos u óvulos, los cuales a los pocos días se transforman en embriones al ser fertilizados. Alrededor del día 13, una pequeña proporción de esos huevos fertilizados se pierden.

La tasa de fertilización está ligada al trabajo que realice el operador de la granja conjuntamente con el verraco en el recelo. Un mal manejo del recelo incidirá negativamente en la tasa de fertilización, ya que el servicio a la madre se hará fuera de las horas apropiadas para obtener el máximo de fertilización de los huevos.

Estudios recientes indican que “para lograr un máximo de supervivencia embrionaria es necesario una adecuada alimentación de la madre antes de ser cubierta o servida y no posterior a la cubrición” (Coma,Jaume y Joseph Gasa, 2007). Manifiestan los investigadores que para tener una buena supervivencia embrionaria es vital que el suministro de nutrientes sea importante durante los días en que se produce la maduración y selección de los folículos, en especial a partir del día 8-10 del ciclo.

  1. c) Mortalidad Predestete:

Se considera que son los eventos que acontecen durante el período de lactancia hasta el momento del destete, normalmente se considera que un 10% de mortalidad durante ese período estaría dentro de los parámetros normales de producción. Es obvio que la MPD incide directamente sobre el número de cerdos a destetar y como consecuencia hace que baje el número de cerdos/madre/año enviados al matadero con las consecuencias conocidas de una baja productividad por cerda.

En conclusión podemos decir que el factor nutritivo juega un rol de extraordinaria importancia en el desempeño y por ende en la productividad de la cerda moderna, por ello se hace necesario preparar con criterio las futuras reproductoras de la granja, esa preparación conlleva a obtener una cerda con una alimentación acorde a las exigencias de su organismo, buscando la muscularidad y no subestimando la condición corporal lo cual nos indicará el manejo que se está llevando a cabo en la  parte alimenticia en la granja en especial durante la Gestación.